EL PASEO DEL
PRADO - ROSEDAL JUANA DE IBARBOUROU
Llegado a Montevideo en 1849 para desarrollar actividades diplomáticas e incluso financieras, Buschenthal intervino activamente en la vida uruguaya.
José de Buschenthal, de orígen judío y converso al cristianismo luterano, había nacido en la ciudad francesa de Estrasbrugo, en 1802. En París trabó amistad con José Ellauri, Ministro uruguayo, y a través de él tuvo las primeras referencias de nuestro país. Gestionó un empréstito para el Gobierno de la Defensa, y aunque el mismo fracasó, pasó a Montevideo, adonde llegó en 1849, a los 47 años de edad, a bordo de la fragata "Antoinette".
El Prado fue, inicialmente, una de las quintas aledañas al Miguelete, el arroyo que todavía sirve de columna vertebral a ese tradicional paseo capitalino.
El Prado fue, inicialmente, una de las quintas aledañas al Miguelete, el arroyo que todavía sirve de columna vertebral a ese tradicional paseo capitalino.
Su esposa doña María Pereira de Buschenthal, hija del barón de Sorocaba y nieta del emperador de Brasil. -conocida por "doña Mariquita"- había permanecido en Madrid y Buschenthal, en la esperanza de atraerla a residir con él en nuestro país, adquirió una vasta extensión de terrenos (alcanzando un área de 61.852 metros cuadrados) que destinó a crear la que llamó "Quinta del Buen Retiro". En ella, Buschenthal levantó su residencia, su parque, su jardín y su cabaña de animales de raza -Buschenthal, también trajo los primeros ejemplares de la raza Durham y plantó legiones de hermosos árboles, que aun hoy cantan al viento su frescura.con el concurso del ingeniero paisajista francés Mr. Lasseaux formó un retiro encantador.
Buschental pobló su quinta de flores y árboles frutales traídos de diversas partes del mundo, en su mayoría especies desconocidas en el país. En un rincón de la quinta, y protegido por fuertes verjas de hierro, creó un zoológico donde abundaron los monos, los osos hormigueros, las inmensas aves exóticas de coloridos plumajes, y las temibles pitones y otras serpientes de las selvas del Brasil.
Pero doña Mariquita se negó a venir a Montevideo.
Buschenthal hizo su ultima estadía entre nosotros en 1870 y luego de unos pocos meses volvió a ausentarse para Europa, falleciendo el 25 de noviembre de ese año en Londres.
Una de sus obras más trascendentes fue su quinta, a la que denominó "Buen Retiro" y de la cual era director M. Lasseaux.
Ambos, según el juicio de Mariano B. Berro, fueron los que formaron en nuestro pais, conjuntamente con Margat, el verdadero gusto artístico y la afición por la arboricultura, horticultura y floricultura.
La cuantía de los gastos que demandaba la conservación de la importante propiedad, llevó a su heredera, doña María Castro Delfim Pereira, a pensar en desprenderse del bien; pero las circunstancias de la época eran muy poco propicias para una venta de tal envergadura, aunque fuera en remate público, dado la guerra civil que vivía el país.
El inmenso predio, luego de pleitos, actos de compra-venta que nunca quedaron del todo claros, debiendo intervenir en forma oficial la Junta Económica Administrativa,
Cuando se remató en 1872, la quinta fue adquirida por Adolfo del Campo, quien la denominó "Prado Oriental" y la libró al público en 1873.
Sobre el núcleo básico de las obras edilicias y los plantíos realizados por Buschenthal, surgió el esplendor del Prado. El gobierno lo expropió en 1889 para dedicarlo a paseo público y nuevas expropiaciones le dieron su fisonomia actual al agregársele las quintas de Morales y la de Agustín de Castro.
En 1889 LA LEY declaro “de utilidad publica la expropiación de todos los terrenos y edificios que constituían la antigua quinta de Buschenthal” y autorizo, asimismo , a expropiar “con el solo objeto de ensanchar el actual paseo publico denominado “Prado Oriental” hasta quince hectáreas sobre las propiedades linderas y colindantes con dicho paseo publico” Entre estas ultimas se encontraba la quinta que fuera adquirida y sirviera de residencia de veraneo y descanso a Bernardo Susviela, poderoso comerciante y estanciero, que integrara el llamado Cabildo Representante de 1822 y fuera miembro de la primera Junta Económico-Administrativa de Montevideo (1830-1832)
En 1902, se había construido el Jardín Botánico, realizado por el ingeniero paisajista francés Carlos Racine que luego llevaría a cabo el Rosedal.
En 1908, pese a que el arquitecto Eugenio Baroffio ya había diseñado los planos del Rosedal, la obra no pudo concretarse porque los fondos destinados a su realización fueron empleados en el arreglo de las plazas Independencia y Cagancha, más conocida actualmente como Plaza Libertad.
Sobre el núcleo básico de las obras edilicias y los plantíos realizados por Buschenthal, surgió el esplendor del Prado. El gobierno lo expropió en 1889 para dedicarlo a paseo público y nuevas expropiaciones le dieron su fisonomia actual al agregársele las quintas de Morales y la de Agustín de Castro.
En 1889 LA LEY declaro “de utilidad publica la expropiación de todos los terrenos y edificios que constituían la antigua quinta de Buschenthal” y autorizo, asimismo , a expropiar “con el solo objeto de ensanchar el actual paseo publico denominado “Prado Oriental” hasta quince hectáreas sobre las propiedades linderas y colindantes con dicho paseo publico” Entre estas ultimas se encontraba la quinta que fuera adquirida y sirviera de residencia de veraneo y descanso a Bernardo Susviela, poderoso comerciante y estanciero, que integrara el llamado Cabildo Representante de 1822 y fuera miembro de la primera Junta Económico-Administrativa de Montevideo (1830-1832)
En 1902, se había construido el Jardín Botánico, realizado por el ingeniero paisajista francés Carlos Racine que luego llevaría a cabo el Rosedal.
En 1908, pese a que el arquitecto Eugenio Baroffio ya había diseñado los planos del Rosedal, la obra no pudo concretarse porque los fondos destinados a su realización fueron empleados en el arreglo de las plazas Independencia y Cagancha, más conocida actualmente como Plaza Libertad.
Recién durante el gobierno municipal de Daniel Muñoz se obtuvo una colección variada de rosales provenientes de Francia, cuya plantación y multiplicación fue cuidadosamente supervisada por el propio Racine. De esta manera en el momento de la inauguración se logró reunir aproximadamente 12.000 rosales.
El 15 de setiembre de 1912 se inauguró el Rosedal .
Una exposición de flores organizada en los salones del Edificio Restaurant Casino del Prado y la inauguración de la Rosaleda constituyeron dos de los acontecimientos más destacados del programa de festejos presentado en noviembre de 1912 por la Comisión Municipal de Verano y Carnaval.
"Tal como estaba previsto en el programa de festejos, el día domingo 17, tras la presentación de la Banda Municipal, se realizó una batalla de flores que distrajo a los visitantes hasta ya pasada la medianoche. Integrada desde ese momento al paseo del Prado, la Rosaleda se transformaría en otro de los puntos de atracción para los visitantes del lugar." ( crónicas de la época)
Actualmente, la rosaleda está formada por cuatro grandes pérgolas de 60 metros de longitud, coronadas por ocho cúpulas al estilo Art Nouveau, en las cuales crecen 300 variedades de rosas antiguas y modernas. Souvenir de Mme Léonie Viennot, Louis Philippe, Alberic Barbier, Rosa banksiae, son algunas de las trepadoras más conocidas.
NOMINACIÓN DE LA
ROSALEDA COMO JUANA DE IBARBOUROU
El nombre de Rosaleda Juana de
Ibarbourou fue oficialmente asignado el 17 de noviembre de 1959.
Esta nominación se realizó en
reconocimiento a la destacada poeta uruguaya, quien es considerada una de las
figuras más importantes de la literatura hispanoamericana del siglo XX.
La rosaleda, inaugurada en 1912,
ha sido un espacio emblemático en Montevideo y su denominación resalta el
legado cultural de Ibarbourou en el país.
Rosa Louis Philippe
Rosa Alberic Barbier
Rosa banksiae
FUENTES
fotouruguay.blogspot.comjardinenuruguay.com
vincealongi.com
2 comentarios:
hermoso todo, gracias ,
y es la primera vez que veo agua en esa fuente, por lo menos en foto ya que , aunque voy mucho nunca hay agua ahi
increible pero no pueden hacer funcionar bien las fuentes que ya existen
No tengo mas que palabras de agradecimiento a quien con su esfuerzo y dedicacion, compartio esta hermosa historia que deja vivo un pasado tan interesante.
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