La Artista que Desafió las Convenciones de su Época
Marie-Rosalie Bonheur, más
conocida como Rosa Bonheur nació en Burdeos, el 16 de marzo de 1822.
Fue una artista francesa, fundamentalmente
pintora que se especializó en la representación de animales y también
escultora, de estilo realista. Fue ampliamente considerada una de las artistas
mujeres más famosas del siglo XIX. Una de sus obras más famosas es Arando en
el Nivernais.
En su obra se observa una evolución
desde presupuestos convencionales y académicos en sus primeros lienzos, con
influencias de Constant Troyon, hasta un estilo impresionista en sus cuadros
finales. Su estilo la convirtió en una representante de la escuela realista.
Hija de Sophie Marquis y del dibujante Raymond Bonheur, se formó con su padre y en el taller de Léon Cogniet.
Sus hermanos fueron Auguste Bonheur que se convertirá en pintor de
paisajes y animales, Isidore Bonheur, escultor, y Juliette Bonheur, que fue
también pintora de animales.
Su madre, de padre
desconocido, fue adoptada por un rico comerciante bordelés, Jean-Baptiste
Dublan de Lahet.
El dibujante francés Raymond
Bonheur no podría haber estado más satisfecho de su prole. Sus dos hijas
(Marie-Rosalie y Juliette) y uno de sus hijos (Auguste) eligieron ser pintores
y su otro hijo (Isidore) prefirió ser escultor. Para un hombre dedicado al
arte, eso era sin duda un motivo de orgullo.
Pero fue la primogénita, Marie-Rosalie (que sería más conocida como Rosa), la que más destacó; no solo por su arte, sino también por su comportamiento rompedor para su época: se vestía y se comportaba “como un hombre” y vivió con naturalidad su homosexualidad desde adolescente.
Bonheur se complacía en
imaginar que el misterio de sus orígenes ocultaba algún secreto de estado, que
era de sangre real, pero actualmente se sabe que su protector, Dublan de Lahet,
era en realidad su abuelo.
La familia Bonheur se adhirió
al grupo político cristiano y socialista de los Saint-Simonians, que promovía
la educación igualitaria entre hombres y mujeres y profetizaba la venida de una
mesías mujer.
Sobre el grupo escribiría: «A
sus doctrinas debo mi gran y gloriosa ambición por el sexo al cual
orgullosamente pertenezco y cuya independencia defenderé hasta el día de mi
muerte».
Rosa tuvo problemas de
aprendizaje, y para ayudarla a memorizar el alfabeto, su madre le sugirió que
eligiera un animal para cada letra y lo dibujara. Esta fue su oportunidad para
desarrollar su talento para el dibujo así como su preferencia por los animales,
que fueron el tema de todas sus obras.
Su madre fue su único apoyo
durante la infancia, ya que la afiliación de su padre lo llevó en un principio
a abandonar a su propia familia para unirse a una comunidad sansimoniana.
Sólo la muerte de su madre
Sophie, hizo que su padre volviera para hacerse cargo de ellos.
Es probable que ese abandono
influyera en la mala opinión que Rosa tenía de los hombres, pues solía decir
que los únicos machos que le interesaban eran los bueyes que pintaba.
Sus padres tuvieron buenas
relaciones con los españoles exiliados en Burdeos como Francisco de Goya y
Leandro Fernández de Moratín. Este último llamaba a Bonheur “ma boule ronde”
(mi bola redonda).
Pasó varios años en el campo,
en el Château Grimont (Quinsac), cerca de Burdeos, donde se ganó la reputación
de marimacha («Yo era el más muchacho de todos»), reputación que la siguió toda
su vida y que no buscó desmentir, ya que llevaba el cabello corto y fumaba
habanos.
En el año 1828 se mudó a París
con su familia, donde su padre fundó una escuela femenina de dibujo.
Comenzó a ir al Louvre para
copiar al óleo los animales de artistas como Nicholas Poussin, Rubens o
Theodore Gericault. Visitó los mataderos para estudiar las disecciones y hacer
bocetos a lápiz de la anatomía de los animales. También asistió como oyente a
clases universitarias de anatomía y osteología veterinaria. En ese periodo
conoció a los zoólogos y naturalistas Etienne Geoffroy Saint-Hilaire e Isidore
Geoffroy Saint-Hilaire.
La
foire du cheval (Feria de caballos), 1835, Museo Metropolitano de Arte, Nueva
York.
La obra "Feria de
caballos" (en francés, "Le marché aux chevaux") fue realizada en 1835, cuando la artista tenía solo 14 años. Aunque es una
de sus obras tempranas, muestra signos de su talento y futuro estilo
distintivo.
La pintura retrata una feria de caballos, un tema que se volvería característico en la obra de Bonheur. En la escena, se pueden ver varios caballos junto con figuras humanas, creando una atmósfera animada y bulliciosa. La composición es dinámica, con las figuras dispuestas en capas y diagonales, lo que añade movimiento a la escena.
A pesar de su joven edad al pintar esta obra, Bonheur muestra un impresionante dominio del realismo. Los caballos están representados con gran detalle, mostrando sus músculos, pelajes y expresiones de manera convincente. Además, Bonheur captura la variedad de personas presentes en la feria, cada una con gestos y actitudes únicos.
Utiliza una paleta de colores vivos y saturados para representar la escena de la feria. Los tonos terrosos predominan en el suelo y los edificios, mientras que los caballos son representados en una gama de colores que van desde el blanco hasta el negro. La luz parece emanar desde el fondo, iluminando la escena y destacando los elementos principales.
La obra refleja el interés de Bonheur por los animales y la vida rural desde una edad temprana. La feria de caballos era un evento común en el campo francés en el siglo XIX, y esta pintura captura la vitalidad y la importancia económica de tales acontecimientos. Además, la obra anticipa los temas que Bonheur exploraría más tarde en su carrera, como la relación entre humanos y animales y la representación de la vida rural.
Bonheur era abiertamente lesbiana. Vivió dos relaciones amorosas: una con
Nathalie Micas, a la que conoció en 1837 (Bonheur tenía 14 años y Micas 12), y
de la que no se separó hasta su muerte en el año 1889.
En 1843 y 1844 obtuvo medallas
en la Exposición de Rouen.
Expuso por primera vez en el
Salón de 1843.
Obtuvo una medalla de tercera
clase en el Salón de 1845.
Es galardonada con una medalla
de oro en el de 1848.
Labourage
nivernais (Arando en Nivernais), 1849.
En el año 1849, expuso
Labourage nivernais (francés para «Arando en Nivernais», Museo de Orsay),
encargo estatal.
"Arando en
Nivernais" es una obra destacada de Rosa Bonheur que muestra su habilidad
para capturar la belleza y la dignidad de la vida rural. A través de su
realismo meticuloso y su composición cuidadosamente elaborada, Bonheur ofrece
una representación conmovedora y auténtica de una escena cotidiana en el campo
francés.
Es una pintura emblemática realizada en 1849 y retrata una escena rural en la región de Nivernais, Francia, donde dos bueyes están arando el campo mientras un hombre los guía. La composición está cuidadosamente equilibrada, con los bueyes en el centro de la imagen y el hombre a su lado, creando una sensación de estabilidad y armonía. La escena se desarrolla en un campo abierto, con un horizonte amplio que enfatiza la vastedad del paisaje rural, una zona de la Borgoña famosa por su ganado vacuno. .
Bonheur es conocida por su habilidad
para capturar detalles realistas en sus obras, y "Arando en
Nivernais" no es una excepción. Los bueyes están representados con gran
precisión, mostrando sus músculos tensos y su expresión concentrada mientras
realizan su labor. El hombre que guía a los bueyes también está representado
con detalle, mostrando el esfuerzo físico involucrado en el arado.
Utiliza una paleta de colores
terrosos y naturales para representar el campo y los bueyes, lo que contribuye
a la sensación de realismo en la obra. La luz natural ilumina la escena desde
arriba, creando sombras suaves y destacando los detalles de la escena. La
atmósfera general es serena y tranquila, reflejando la paz y la belleza de la
vida rural.
"Arando en Nivernais" refleja el profundo respeto de Bonheur por la vida y el trabajo en el campo. La obra celebra la laboriosa tarea de arar la tierra, destacando la relación armoniosa entre el hombre, los animales y la naturaleza. Además, la pintura puede interpretarse como un comentario sobre la importancia del trabajo agrícola en la sociedad rural del siglo XIX y como un homenaje a la vida campesina. La obra fue expuesta en la Exposición Universal de 1889.
León
(El vigía).1850
Se centró sobre todo en los leones, que ocupan gran parte de su producción.
Usó como modelos primero a los del zoo de París y más tarde a la pareja de la subespecie del Atlas que tenía en su finca. En estos animales Bonheur reconoció esa poderosa nobleza esencial que deseó trasmitir con su obra.
En este sentido, el ejemplar del Prado es singular,
pues su planteamiento como retrato al
borde de lo humano contribuye a subrayar
esa cualidad.
Sultan
y Rosette, los perros de los Czartoryski, 1852, Museo Nacional de
Varsovia.
"Sultan y Rosette, los perros de los Czartoryski" es una obra que data de 1852.
La obra retrata a dos perros, Sultan y Rosette, pertenecientes a la familia Czartoryski. Los perros están representados en primer plano, con una pose majestuosa y miradas alertas. La composición está centrada en los perros, con un fondo oscuro que resalta sus figuras y personalidades. Bonheur capta la esencia de los animales, mostrando su nobleza y carácter.
La pintora muestra su habilidad para representar animales con gran realismo, y esta obra no es una excepción. Los pelajes de los perros están pintados con detalles minuciosos, mostrando la textura y el brillo de sus pieles. Los ojos de los perros parecen mirar directamente al espectador, creando una conexión emocional con la obra.
Bonheur utiliza una paleta de colores cálidos y tonos tierra para representar a los perros y el fondo oscuro resalta sus figuras. La luz parece provenir de la parte superior derecha de la obra, iluminando sutilmente las figuras y creando sombras suaves que añaden profundidad y dimensión a la composición.
La obra es un retrato de los perros de la familia Czartoryski, lo que sugiere una conexión emocional y un aprecio por los animales por parte de la familia. Bonheur muestra su habilidad para capturar la personalidad y el carácter de los animales, resaltando su importancia en la vida de las personas.
Rosa Bonheur visitó los Estados Unidos en 1852. Durante su visita, Bonheur expuso algunas de sus obras en la Exposición Universal de Nueva York, lo que le otorgó cierta fama internacional.
Su estilo realista y sus representaciones de animales la hicieron muy popular entre el público estadounidense. Además, Bonheur fue recibida con gran entusiasmo por la prensa y la crítica de arte de la época.
Su
visita a los Estados Unidos contribuyó a su reconocimiento internacional como
una de las artistas más destacadas de su tiempo.
Con la Feria de caballos, pintada en el año 1835 siendo una niña, y que fue presentado en el Salón de 1853, conoció una gloria internacional que le valió para efectuar viajes en el curso de los cuales le presentaron a personalidades como la reina Victoria.
Gathering-for-the-Hunt (Reunión para la caza), 1856.
"Reunión para la caza" en esta pintura que retrata un tema típicamente rural y relacionado con la caza, que era un tema popular en el arte del siglo XIX.
La pintura
representa una escena de preparación para la caza, con hombres y perros
reunidos en un paisaje campestre. La composición está cuidadosamente
equilibrada, con figuras humanas y caninas distribuidas de manera uniforme en
el lienzo. Esto crea una sensación de armonía y movimiento en la escena.
En "Reunión para la caza", cada figura humana y animal está meticulosamente representada, desde las expresiones en los rostros hasta los pliegues de la ropa y los pelajes de los perros. Este realismo contribuye a la sensación de vida y actividad en la pintura.
La pintora emplea una paleta de colores naturales y terrosos para representar el paisaje y las figuras. Los tonos cálidos y suaves crean una atmósfera tranquila y serena. La luz natural que ilumina la escena añade profundidad y dimensión, destacando las formas y creando contrastes sutiles.
La pintura transmite una sensación de anticipación y actividad, sugiriendo el comienzo de una cacería. Los perros y los hombres están enérgicos y listos para la acción, lo que refleja el vínculo entre humanos y animales en la actividad de caza. Además, la obra puede interpretarse como un homenaje a la vida rural y a la relación armoniosa entre el hombre y la naturaleza.
Bonheur conoció grandes personalidades, a la emperatriz Eugenia, e incluso al Coronel Cody (Buffalo Bill), que le ofreció una auténtica panoplia de sioux.
El travestismo era entonces
ilegal, por lo que en 1857 obtuvo de la policía una autorización para aparecer
en público vestida con pantalones, esto para no ser molestada mientras hacía bocetos
en lugares dominados por hombres como las ferias de ganado, las cuales
frecuentaba.
Cada seis meses, alegando motivos de salud, acudía a la Prefectura de Policía de París para solicitar el Permission de Travestissement, firmado por un médico.
Muleros
españoles atravesando los Pirineos (1857),
La pintura "Muleros españoles atravesando los Pirineos" es una obra notable del pintor francés Rosa Bonheur, realizada en 1857.
En esta obra, Bonheur captura un paisaje
montañoso con muleros que atraviesan los Pirineos, la cadena montañosa que
separa España y Francia. La pintura refleja el interés de Bonheur por las
escenas rurales y su habilidad para representar animales y paisajes con gran
detalle y realismo. Esta obra es reconocida por su composición impresionante y
su capacidad para transmitir la grandeza y la majestuosidad de la naturaleza.
La pintura se encuentra actualmente en la colección del Museo de Orsay en
París, Francia.
Rosa Bonheur con un buey, retrato de Edouard Louis Dufube (1857), óleo sobre tela.
Pastor de las Highlands (1859), óleo sobre tela
La pintura "Pastor de las
Highlands" (1859) es una obra destacada de la reconocida artista francesa
Rosa Bonheur. Esta pintura al óleo sobre tela muestra a un pastor escocés en
las tierras altas de Escocia, descansando con su rebaño y su perro. La obra
refleja la maestría de Bonheur en la representación de escenas pastorales y
animales, destacando su habilidad para capturar la vida rural y la conexión
entre el pastor y su entorno natural. La pintura es una muestra del realismo y
la sensibilidad artística de Rosa, quien se destacó por sus obras que
retrataban la vida rural y la naturaleza con gran detalle y autenticidad.
La
emperatriz Eugenia de Montijo visita el estudio de Rosa Bonheur en Thomery, en
1863. Litografía de Frédéric Lix y Auguste Victor Deroy .
Participó con diez obras en la Exposición Universal de París de 1867. Presentó Cambio de pasto, que había sido un encargo personal de la Emperatriz Eugenia de Montijo.
Fue la primera mujer artista en ser
condecorada con la Legión de Honor, en 1865.
En 1866 el emperador
Maximiliano I de México le concedió la Cruz de la Orden de San Carlos.
Rosa Bonheur fue nombrada
miembro de la Real Academia de Bellas Artes de Amberes, Bélgica, en 1869. Esta
distinción fue un reconocimiento a su destacada carrera como pintora,
especialmente por su maestría en la representación de animales y escenas
rurales.
Rosa Bonheur fue nombrada
miembro honorario de la Real Academia de Acuarelistas de Londres en 1869. Este
nombramiento fue un reconocimiento a su destacada habilidad en el arte de la
acuarela, así como a su contribución al mundo del arte en general. La Real
Academia de Acuarelistas de Londres, ahora conocida como la Real Sociedad de
Acuarelistas, es una institución prestigiosa que promueve y exhibe el arte de
la acuarela en el Reino Unido.
Jabalíes
en la nieve, 1870 cerca.
La obra "Jabalíes en la nieve" fue pintada en 1870, es un impresionante retrato de dos jabalíes en un paisaje nevado.
El tema principal de la obra son los tres jabalíes, que ocupan la mayor parte del lienzo y están situados en el centro de la composición. Los jabalíes están representados en una pose dinámica, como si estuvieran caminando a través de la nieve. La composición está equilibrada y armoniosa, con los jabalíes como punto focal y el paisaje nevado que los rodea.
Bonheur muestra su habilidad para capturar detalles realistas en la representación de los jabalíes y el paisaje nevado. Los animales están representados con precisión en términos de anatomía y expresión, mostrando la fuerza y la ferocidad característica de los jabalíes. La textura de la piel y el pelaje de los animales, así como la textura de la nieve, están representadas con gran detalle y cuidado.
La pintora utiliza una paleta de colores fríos y tonos suaves para representar el paisaje nevado. Los tonos terrosos crean una atmósfera fría y tranquila, que refleja la sensación de un día nevado en el campo. La luz parece filtrarse a través de las nubes, iluminando suavemente la escena y creando sombras suaves que añaden profundidad y dimensión.
"Jabalíes en la nieve" captura la belleza y la majestuosidad de la vida salvaje en su entorno natural. Los jabalíes son animales imponentes y poderosos, que evocan un sentido de respeto y admiración por la naturaleza. La obra puede interpretarse como un recordatorio de la importancia de preservar y proteger el hábitat natural de los animales salvajes, así como de la belleza y la serenidad de la vida en la naturaleza.
Fue condecorada con una medalla. También participó en la Exposición Universal de Londres de 1871.
Weaning
the Calves (Destete de los terneros), 1879.
El Cid (antes llamado "Cabeza de león") 1879
Su marchante Gambart regaló un
cuadro, El Cid (antes llamado "Cabeza de león"), al Museo del Prado
en 1879.
Fotografía
de Rosa Bonheur
(años
1880-90) en su jardín de By.
Rosa Bonheur fue condecorada
con la Orden de Leopoldo de Bélgica en 1882. Esta condecoración fue un
reconocimiento significativo de su contribución a las artes, especialmente en
el ámbito de la pintura de animales y escenas rurales, y su influencia en el
mundo artístico de su época. La Orden de Leopoldo es una de las más altas
órdenes de caballería belgas y se otorga por méritos sobresalientes en varios
campos, incluyendo el arte y la cultura.
Querido
Toutou. 1885. Centraal Museum
La obra "Querido Toutou" fue pintada en 1885, es un retrato encantador de un perro, que parece ser un terrier, mirando directamente al espectador.
El tema
principal de la obra es el perro, quien ocupa casi todo el lienzo y está
ubicado en el centro de la composición. El perro mira directamente al
espectador con una expresión amigable y cariñosa, lo que crea una conexión
inmediata entre el observador y el sujeto. La composición es simple pero
efectiva, con el perro como punto focal y un fondo neutro que ayuda a enfocar
la atención en el sujeto principal.
Bonheur muestra su habilidad para capturar detalles realistas en la representación del perro. Los pelajes, las orejas, los ojos y el hocico del perro están pintados con precisión y cuidado, lo que transmite la textura y el carácter del animal de manera convincente. Los ojos del perro son especialmente expresivos y parecen reflejar una profunda conexión emocional.
Bonheur utiliza una paleta de colores suaves y naturales para representar al perro y el fondo neutro. Los tonos cálidos y tiernos resaltan la ternura y la calidez de la escena. La luz parece provenir de la parte superior izquierda de la obra, iluminando suavemente al perro y creando sombras sutiles que añaden profundidad y dimensión.
"Querido Toutou" captura la belleza y la intimidad de la relación entre los seres humanos y los animales. El título, "Querido Toutou", sugiere un sentido de afecto y cariño hacia el perro, que es una mascota querida y apreciada. La obra puede interpretarse como un homenaje a la lealtad y la compañía que los animales pueden ofrecer a los seres humanos, así como a la conexión emocional que puede existir entre ellos.
Pabellón
de caza, 1887, Museo de Arte de San Luis.
La obra "Pabellón de
caza", fue creada en 1887.
La pintura representa un
paisaje rural con tres caballos en un camino. La figura humana, que
probablemente sea un cazador o un guía, está junto a los caballos. La
composición está centrada en los caballos y el hombre, con el paisaje natural que
los rodea. Este enfoque en los elementos naturales resalta la relación entre
los humanos, los animales y su entorno.
La disposición de las figuras y la arquitectura crea una sensación de armonía y equilibrio en la obra.
Bonheur muestra su habilidad para capturar detalles realistas en esta obra. Los elementos arquitectónicos del pabellón, así como la vestimenta y las expresiones de las figuras, están representados con precisión y detalle. Además, Bonheur captura la atmósfera del lugar con gran realismo, transmitiendo una sensación de tranquilidad y serenidad.
Las obras de Rosa fueron muy
apreciadas, así en 1888 un cuadro suyo alcanzó las 4.200 libras en Christie´s.
El Coronel William F. Cody (Buffalo Bill), 1889,
Buffalo Bill Center of the West, Cody.
"El Coronel William F. Cody (Buffalo Bill)" es una obra pintada en 1889.
La obra
retrata a William F. Cody, más conocido como Buffalo Bill, quien fue una figura
prominente en el Viejo Oeste de los Estados Unidos. En la pintura, Cody está
representado montado a caballo, con una expresión seria y decidida. La
composición está centrada en la figura de Cody, con el caballo ocupando una
gran parte del lienzo. La postura erguida y el gesto determinado de Cody
reflejan su carácter fuerte y su papel como figura destacada en la historia del
Oeste Americano.
Bonheur muestra su habilidad para capturar detalles realistas en esta obra. Tanto la figura de Cody como la del caballo están representadas con gran detalle, desde los pliegues de la ropa de Cody hasta los músculos tensos del caballo. Los colores y las texturas se utilizan para crear una representación vívida y convincente de la escena.
La artista utiliza una paleta de colores terrosos y naturales para representar a Cody y su entorno. Los tonos cálidos y oscuros crean una atmósfera evocadora del paisaje del Oeste Americano. La luz parece provenir de la parte superior izquierda de la obra, iluminando sutilmente la figura de Cody y destacando su presencia en la escena.
La obra es un retrato de William F. Cody, una figura icónica en la historia del Viejo Oeste de los Estados Unidos. Buffalo Bill fue conocido por sus habilidades como cazador, explorador y showman, y su famoso espectáculo, el "Buffalo Bill's Wild West", contribuyó a popularizar la imagen del Oeste Americano en todo el mundo. La pintura de Bonheur captura la determinación y el espíritu aventurero de Cody, así como su papel en la construcción del mito del Oeste Americano.
Rosa Bonheur fue nombrada miembro honorario de la Academia de Bellas Artes de Pensilvania, Estados Unidos, en 1889. Este reconocimiento fue otorgado por su destacada carrera como pintora, especialmente por su habilidad para representar animales y escenas rurales de una manera realista y emotiva. La Academia de Bellas Artes de Pensilvania es una institución importante en el mundo del arte en Estados Unidos, y el nombramiento de Bonheur como miembro honorario fue un testimonio de su influencia internacional en el campo del arte.
Anna Elizabeth Klumpke
Rosa Bonheur y Anna Elizabeth
Klumpke se conocieron en 1889 después de la muerte de Nathalie Micas. Anna era
una estadounidense, también pintora, con la que vivió diez años hasta la muerte
de Bonheur, siendo Klumpke su heredera universal.
Bonheur vestía ropa
considerada masculina en la época y rompía las convenciones sociales sobre el
comportamiento femenino al fumar cigarrillos y usar el cabello corto. Nada de
lo anterior provocó escándalo alguno, pese a ser un tiempo tan preocupado por
las convenciones, dada su fama de excéntrica y su carácter fuerte.
En 1894, fue honrada con la
Gran Cruz de la Legión de Honor, convirtiéndose en la primera mujer en recibir
este prestigioso reconocimiento.
Cementerio del Père Lachaise
Rosa Bonheur murió el 25 de mayo de 1899, en Thomery en el château de By y fue inhumada en el cementerio del Père Lachaise (división 74).
Bonheur, Micas y Klumpke
fueron enterradas juntas en el cementerio del Père Lachaise.
Rosa Bonheur y Anna Elizabeth
Klumpke escribieron juntas la autobiografía de la artista. La obra se titula
"Rosa Bonheur: Sa Vie, Son Œuvre" (Rosa Bonheur: Su Vida, Su Obra) y
fue publicada en 1908. Klumpke, siendo su pareja y también una artista y
escritora, colaboró estrechamente con Bonheur en la redacción de esta
autobiografía, que ofrece una visión detallada de la vida y obra de la famosa pintora
francesa.
Actualmente es celebrada como
una pionera por la comunidad LGBT, encajando con lo que se conoce hoy como genderqueer
o género no binario. En sus propias palabras, creía en un "Jesucristo
andrógino".
Pensamientos
feministas de Boheur.
“No aguanto a las mujeres que piden permiso para pensar”.
“ De los hombres no espero ayuda para conquistar mis derechos.
“No tenía más alternativa que
darme cuenta de que las prendas propias de mi sexo eran un estorbo total. Pero
el traje que llevo es mi uniforme de trabajo, nada más, y si les incomoda lo
más mínimo, estoy completamente preparada para ponerme una falda, ya que todo
lo que he de hacer es abrir un armario para encontrar un amplio surtido de
conjuntos femeninos”, (se excusó irónicamente la artista por escrito.)
HOMENAJES
Su antiguo taller forma parte del Museo Rosa Bonheur en el castillo de By.
https://www.buscabiografias.com/
https://historia.nationalgeographic.com.es/
https://www.mujeresenlahistoria.com/
https://www.3minutosdearte.com/
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