Blog de Arinda

OBJETIVO :En este Blog vas a encontrar mis producciones en pintura y escultura. Además, material recopilado a través de mi trabajo como maestra, directora e inspectora, que puede ser de interés para docentes y estudiantes magisteriales .

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jueves, 3 de julio de 2025

3 DE JULIO DE 1901 NACÍA JULIO MARTÍNEZ OYANGUREN

 

Un Pionero de la Guitarra Uruguaya en el Mundo



Julio Martínez Oyanguren fue un compositor, guitarrista e ingeniero mecánico uruguayo. Nació el 3 de julio de 1901 en Durazno, Uruguay

Martínez Oyanguren fue un reconocido guitarrista clásico y compositor, y su obra ha sido reconocida tanto en Uruguay como a nivel internacional. Fue alumno de Agustín Barrios, y su carrera como concertista de guitarra se asentó en las décadas de 1920 y 1930.

. También pasó un tiempo en Europa y Estados Unidos, donde continuó actuando y componiendo música.

En 2021 se publicó una biografía sobre Martínez Oyanguren, que arroja luz sobre su trayectoria artística y aportes a la música en Uruguay y América

. Julio Martínez Oyanguren  fue un compositor, guitarrista e ingeniero mecánico uruguayo nacido en Durazno el 13 de setiembre de 1901. 

 

Julio Martínez Oyanguren ante un micrófono de la RCA.

Cuando Agustín Barrios, el guitarrista y compositor paraguayo de música clásica más reconocido, llegó a Durazno por esa época, Julio se sintió muy animado por el maestro paraguayo. Tocaron a dúo juntos y desarrollaron una profunda amistad que floreció en la década de 1920 cuando ambos vivían en Montevideo. Hay una historia que Oyanguren había arreglado para que Barrios la grabara en Nueva York, pero que el maestro paraguayo falleció tristemente antes de que pudiera emprender el viaje. Si lo hubiera hecho es probable que su fama se hubiera extendido mucho antes de la grabación fundamental de John Williams de las composiciones de Barrios en 1977. En un concierto de 1934 en Durazno, Oyanguren dedicó gran parte del programa a la obra de Barrios.

 Entonces, como ahora, la carrera como guitarrista profesional estuvo plagada de incertidumbres, y en 1919 el joven Julio se matriculó en la academia naval.

Continuó su labor musical, inspirado por el guitarrista español ciego Antonio Jiménez Manjón, que se había trasladado al Río de la Plata, y algunas de cuyas obras interpretó. Además, se sintió estimulado por los conciertos de Miguel Llobet, que actuaba con frecuencia.

Se graduó en 1924 como oficial e ingeniero mecánico. Se mudó a Roma donde continuó estudiando y comenzó a componer. Declarado “persona non grata” por Mussolini por sus convicciones liberales, regresó a Uruguay en 1927. Su carrera concertística comenzó a florecer en los años siguientes y actuó ampliamente, incluso en Brasil. 

 

Oyanguren en 1932

En 1935, llegó a Estados Unidos con su esposa e hijo. Situándose a sí mismo y a su familia en una Nueva York muy dinámica, se dio cuenta de que su fama sudamericana debía reavivarse. Su debut en el Ayuntamiento en octubre de ese año fue un gran éxito. Fue aclamado como “el Paderewski de la guitarra”, y las puertas se abrieron ampliamente para el joven artista. Actuó con la Filarmónica de Nueva York en el estadio Lewisohn frente a una audiencia de más de 18.000 personas, así como con la Orquesta General Electric bajo la dirección de Terig Tucci.

Oyanguren tuvo su propio programa de radio semanal en NBC durante varios años. Su alumno Rolando Valdés Blain recordó pasar páginas para su maestro mientras interpretaba cientos de obras. En 1939, se convirtió en el primer guitarrista en actuar en la Casa Blanca cuando actuó para Franklin Roosevelt. Más tarde recordó que a Roosevelt le gustaban especialmente Pericón y Vidalita.



Grabó una amplia gama de repertorio con RCA, Columbia y Decca, incluidos, por supuesto, los románticos, entre ellos Tárrega y Albéniz, pero también la gama de su trabajo se remonta al renacimiento y al barroco: Milán, Narváez, Sanz., Rameau, Campion, Cimarosa y al período clásico: Aguado, Ferrandiere y la primera interpretación grabada de la “Grand Sonata” de Sor y la “Grande Overture” de Giuliani. Grabó obras contemporáneas: “Homage à Debussy” de Falla, “Rafaga” de Turina, una “Canción” de Ponce, así como transcripciones de Brahms, Wieniavski, Massenet y Schubert.

Introdujo al público estadounidense las obras folclóricas de América del Sur, como “La Cumparsita”, “Choros 1” (Villa Lobos) y bambucos, joropos, estilos, danzas incas, gatos y otras danzas populares. Incluso enceró algunas de sus propias composiciones. Melodía gitana.

Segovia, por supuesto, había estado actuando en los Estados Unidos desde 1928, y luego desde 1943 en adelante. 

De hecho, estableció su hogar en Nueva York durante veinte años. Naturalmente, Oyanguren y Segovia se conocían muy bien, y parece que hubo un elemento de competencia, incluso rivalidad, entre ellos. Varias historias han circulado a lo largo de los años, pero en ausencia de pruebas, no tiene sentido relatarlas aquí. 

Uno, relativamente divertido, dice que la amistad de los dos guitarristas se disolvió por un desacuerdo en la digitación del “Courante” de la quinta suite para violonchelo de Bach. En cualquier caso, la prensa solía compararlos, echando leña al fuego, y se citaba a menudo a Segovia y Oyanguren, uno como el gran guitarrista español y el otro como su homólogo latinoamericano.

 

En 1941, Oyanguren decidió regresar a Uruguay con su esposa y tres hijos. Se han sugerido varias teorías para explicar este movimiento, pero podría haber sido tan simple como un anhelo nostálgico por su tierra natal.

Regresó a Durazno, donde vivió durante 15 años.

Continuó actuando ampliamente; a su regreso, actuó en Buenos Aires en el Teatro Odeón con críticas entusiastas. Realizó giras por todo Uruguay, realizó una serie de recitales en radio, exhibiendo un repertorio a partes iguales clásico y folclórico. De 1943 a 1947, se desempeñó como jefe de policía en Durazno, un movimiento de carrera poco probable para un músico de renombre. Posteriormente regresó al escenario del concierto. Distinguidos compositores le dedicaron obras: el brasileño Lorenzo Fernández escribió una “Suite Brasileña” y el venezolano Bautista Plaza una “Sonata Antigua”. En 1950,

El año 1956 vio a Oyanguren mudarse a Montevideo, donde permaneció el resto de su vida. Continuó actuando, componiendo y grabando.

Oyanguren murió el 13 de septiembre de 1973 en Montevideo, Uruguay.


HOMENAJES


Lauro Ayesteran, el eminente musicólogo uruguayo, escribió sobre Oyanguren que “su nombre ha pasado a formar parte de la historia de la guitarra, y su prestigio, más allá del clamor crítico, lo ha marcado como un guitarrista de primer orden”.



En Durazno, en la esquina de Wilson Ferreira Aldunate y Rivera, la Asociación Amigos de la Música lleva su nombre. Ha sido escenario de memoriosas presentaciones, de diversas expresiones culturales.

Hoy su edificio muestra una notoria decadencia que, sin analizar las responsabilidades, no condice con lo que significó Oyanguren para Durazno y el mundo y sería necesario un despertar a la reacción general para su recuperación.


Han quedado en exhibición permanente dos de las tres guitarras de  Julio Martínez Oyanguren que familiares del gran concertista de guitarra donaron al Museo Casa de Rivera.

Se trata de tres instrumentos que él utilizó en su extensa y destacada carrera como intérprete de la guitarra denominada clásica o española, que estaban en poder de su nieta, la Sra. Alicia Martínez Todeschini.

Se trata de una guitarra del afamado taller de “José Ramírez” ubicado en Madrid, construida en el año 1907, una guitarra de la casa “Vicente Tatay” de Nueva York, posiblemente construida en la década de 1930 cuando Martínez Oyanguren residió por varios años en los Estados Unidos, una guitarra del destacado lutier uruguayo Juan Carlos Santurión, del año 1952.

LEGADO



El legado de Julio Martínez Oyanguren que perdura hasta

 hoy es principalmente su destacada contribución a la música

 clásica como guitarrista y compositor uruguayo de renombre

 internacional.

Su nombre forma parte de la historia de la guitarra clásica,

 siendo reconocido como un guitarrista de primer orden, con

 obras y presentaciones que marcaron tanto a Uruguay como

 a otros países.

 

Entre los aspectos más destacados de su legado están:



Su obra musical y su virtuosismo en la guitarra clásica, que le

 valieron homenajes y la dedicación de composiciones por

 parte de otros músicos reconocidos, como Lorenzo

 Fernández y Bautista Plaza.

 

Su trayectoria internacional, que incluyó conciertos en

 Argentina, Estados Unidos (donde fue artista exclusivo de

 NBC y realizó el primer recital televisado de guitarra en

 1934), y Europa, consolidándolo como un embajador musical

 de Uruguay.

 


La preservación de sus instrumentos históricos, con tres de

 sus guitarras exhibidas permanentemente en el Museo Casa

 de Rivera, lo que permite mantener viva su memoria y su

 influencia en la cultura musical uruguaya.

 


El reconocimiento local, especialmente en su ciudad natal

 Durazno, donde una asociación cultural lleva su nombre y su

 legado sigue siendo parte de la identidad cultural, a pesar de

 que algunos espacios vinculados a él requieren recuperación

 y mantenimiento.

Julio Martínez Oyanguren dejó un legado musical y cultural

 que continúa siendo valorado en Uruguay y en el ámbito

 internacional, especialmente en el mundo de la guitarra

 clásica, donde su prestigio y contribuciones siguen vigentes.


FUENTES

https://duraznohoy.com/

https://es.wikipedia.org/

https://tierradentro.com.uy/

lunes, 31 de marzo de 2025

EL 31 DE MARZO DE 1685 NACÍA JOHANN SEBASTIÁN BACH

A 260 AÑOS DE SU PASAJE A LA POSTERIDAD

El retrato- Volbach- pintado en 1750, donde nos muestra a Bach en sus últimos meses de vida.

Johann Sebastian Bach (IPA /joˈhan/ o /ˈjoːhan zeˈbastjan ˈbax/ en alemán) Eisenach, nació en Turingia, 31 de marzo de 1685 y murió en Leipzig, el 28 de julio de 1750.

Fue un compositor alemán considerado por muchos como el más grande compositor de todos los tiempos, Johann Sebastian Bach nació en el seno de una dinastía de músicos e intérpretes que desempeñó un papel determinante en la música alemana durante cerca de dos siglos y cuya primera mención documentada se remonta a 1561. 

Hijo de Johann Ambrosius, trompetista de la corte de Eisenach y director de la música de dicha ciudad, la música rodeó a Johann Sebastian Bach desde el principio de sus días.


Una representación del siglo XIX de la familia Bach en la práctica de música de mañana. Bach es en el teclado y otros miembros de la familia están jugando o cantando.

A la muerte de su padre en 1695, se hizo cargo de él su hermano mayor, Johann Christoph, a la sazón organista de la iglesia de San Miguel de Ohrdruf. 

Bajo su dirección, el pequeño Bach se familiarizó rápidamente con los instrumentos de teclado, el órgano y el clave, de los que sería un consumado intérprete durante toda su vida. 

Su formación culminó en el convento de San Miguel de Lüneburg, donde estudió a los grandes maestros del pasado, entre ellos Heinrich Schütz, al tiempo que se familiarizaba con las nuevas formas instrumentales francesas que podía escuchar en la corte.


Cafetería Zimmermann, donde Bach trabajó entre 1732 y 1741. Aquí compuso e interpretó la famosa Cantata del café, BWV 211 (1735).

A partir de estos años, los primeros del siglo XVIII, Bach estaba ya preparado para iniciar su carrera como compositor e intérprete. 

Una carrera que puede dividirse en varias etapas, según las ciudades en las que el músico ejerció: Arnstadt (1703-1707), Mühlhausen (1707-1708), Weimar (1708-1717), Köthen (1717-1723) y Leipzig (1723-1750).
Si en las dos primeras poblaciones, sobre todo en Mühlhausen, sus proyectos chocaron con la oposición de ciertos estamentos de la ciudad y las propias condiciones locales, en Weimar encontró el medio adecuado para el desarrollo de su talento. 

Nombrado organista de la corte ducal, Bach centró su labor en esta ciudad sobre todo en la composición de piezas para su instrumento músico: la mayor parte de sus corales, preludios, tocatas y fugas para órgano datan de este período, al que también pertenecen sus primeras cantatas de iglesia importantes. 

En 1717 Johann Sebastian Bach abandonó su puesto en Weimar a raíz de haber sido nombrado maestro de capilla de la corte del príncipe Leopold de Anhalt, en Köthen, uno de los períodos más fértiles en la vida del compositor, durante el cual vieron la luz algunas de sus partituras más célebres, sobre todo en el campo de la música orquestal e instrumental: los dos conciertos para violín, los seis Conciertos de Brandemburgo, el primer libro de El clave bien temperado, las seis sonatas y partitas para violín solo y las seis suites para violoncelo solo.

1)...2).
1) - La primera página del manuscrito de Anna Magdalena Bach de la Suite nº 1 para violonchelo solo, BWV 1007.
2) -Órgano de Weimar en 1660. En este instrumento, Bach compuso entre 1708 y 1717 gran parte de su obra organística. Cabe mencionar la curiosa ubicación del órgano y la orquesta, en el hueco practicado justo debajo del tejado, lo que daba al recinto una peculiar sonoridad.

Durante los últimos veintisiete años de su vida fue Cantor de la iglesia de Santo Tomás de Leipzig, cargo éste que comportaba también la dirección de los actos musicales que se celebraban en la ciudad. 

A esta etapa pertenecen sus obras corales más impresionantes, como sus dos Pasiones, la monumental Misa en si menor y el Oratorio de Navidad.




Concierto de Brandeburgo nº 3, de Bach
Mientras Johann Sebastian Bach fue maestro de capilla de la corte del príncipe Leopold de Anhalt-Köthen, entre 1717 y 1723, completó los seis conciertos conocidos como Conciertos de Brandeburgo. El fragmento del tercero que escuchamos es representativo de la forma del concerto grosso: tres grupos de tres instrumentos de cuerda se combinan, alternan y contrastan con otro grupo.

En los últimos años de su existencia su producción musical descendió considerablemente debido a unas cataratas que lo dejaron prácticamente ciego. 

  Casado en dos ocasiones, con su prima Maria Barbara Bach la primera y con Anna Magdalena Wilcken la segunda, Bach tuvo veinte hijos, entre los cuales descollaron como compositores Wilhelm Friedemann, Carl Philipp Emanuel, Johann Christoph Friedrich y Johann Christian.


Bach (izquierda) con tres de sus hijos

Bach tuvo numerosos alumnos y estudiantes a lo largo de su vida: según el estudioso Hans Löffler, más de ochenta. 
Entre ellos se cuenta a Johann Friedrich Agricola, yerno suyo, que en los últimos años del maestro fue copista de sus obras, además de ayudarle en la redacción de sus últimas composiciones, como en el caso de uno de sus últimos corales para órgano, el BWV 668, el último coral del ciclo de Leipzig BWV 651-668. Ya en su vejez, cuando la gente se refería al apellido Bach lo hacía pensando en su famoso hijo Carl Phillip. 

En las generaciones posteriores a Bach, sólo algunos compositores y músicos conocían su obra. Básicamente eran sus hijos y sus alumnos, gracias a ellos se conservó y no cayó en el olvido la producción del Cantor de Santo Tomás, mientras que el resto del mundo no tardaría muchos años en olvidarle después de su muerte, en plena mitad del siglo XVIII.


Sello postal de la República Federal de Alemania dedicado a Johann Sebastian Bach.

Pese a que tras la muerte del maestro su música, considerada en exceso intelectual, cayó en un relativo olvido, músicos célebres, como Joseph Haydn, Wolfgang Amadeus Mozart, Ludwig van Beethoven, Felix Mendelssohn-Bartholdy o Frédéric Chopin, tuvieron un gran reconocimiento por las obras que conocieron de Bach, generalmente obras para teclado, pues el resto de su producción no llegó a ellos. 

Beethoven, sin conocer la totalidad de su obra, lo definió con un hermoso juego de palabras en alemán: "Nicht Bach, sondern Meer sollte er heissen", cuya traducción es "No debiera llamarse "Bach" ('arroyo', en alemán), sino "Meer" ('mar')". La razón es sencilla: al magisterio que convierte sus composiciones en un modelo imperecedero de perfección técnica, se une una expresividad que las hace siempre actuales.

.....
----- Estatua de Bach en Leipzig.--------------Estatua de Johann S. Bach, en Shanghai, China.

Para saber más ingresa en
http://es.wikipedia.org/wiki/Johann_Sebastian_Bach

http://www.biografiasyvidas.com

jueves, 20 de marzo de 2025

20 DE MARZO COMIENZA EL OTOÑO -Las Cuatro Estaciones (Four Seasons) - Vivaldi

"Otoño" es una de las cuatro piezas que componen la famosa obra "Las Cuatro Estaciones" de Antonio Vivaldi, una de las composiciones más conocidas y representativas del barroco. "Las Cuatro Estaciones" fue escrita en 1723 y es un conjunto de cuatro conciertos para violín y orquesta, cada uno representando una estación del año: Primavera, Verano, Otoño e Invierno.

En su conjunto, "Otoño" es una pieza vibrante y variada que, al igual que las otras estaciones de la obra, usa la música para evocar imágenes y emociones relacionadas con los cambios naturales y las actividades humanas de la estación correspondiente.

"Las Cuatro Estaciones" en general es un ejemplo brillante de la música programática, ya que cada concierto está diseñado para evocar escenas específicas de la naturaleza y la vida cotidiana, algo muy innovador para su época.

El concierto de Otoño (en Fa mayor, RV 293) se compone de tres movimientos y refleja musicalmente el paso de la estación. En general, la obra busca capturar tanto el ambiente natural como las actividades humanas características de esa estación.

Primer movimiento (Allegro):

En este movimiento, Vivaldi captura el sentimiento de la cosecha y las celebraciones asociadas a ella. La música evoca la alegría y la abundancia, a través de un ritmo enérgico y festivo.

Los violines a menudo imitan el sonido de la danza, y la orquesta transmite un aire de entusiasmo y festividad. El movimiento refleja una celebración rítmica del trabajo en los campos y la gratitud por la cosecha.

 

Segundo movimiento (Adagio molto e cantabile):

Este movimiento es mucho más tranquilo y melancólico. Aquí, Vivaldi expresa la calma del otoño, cuando el clima comienza a enfriarse y las personas disfrutan de momentos de descanso y reflexión. La música es más suave y lírica, evocando la serenidad y el recogimiento que caracterizan esta estación. La interpretación a menudo tiene un aire de nostalgia, y la instrumentación crea una atmósfera introspectiva.

 

Tercer movimiento (Allegro):

 Este movimiento describe una escena de caza, con los cazadores y perros persiguiendo a sus presas. El ritmo rápido y los rápidos pasajes de los violines sugieren el movimiento de la caza y la excitación de la persecución.

 Es un final animado y lleno de energía, que contrasta con la calma del segundo movimiento, mostrando una vez más el contraste de emociones que el otoño puede evocar.

 

 

COMO LO USAMOS EN LA ESCUELA

 

Abordar "Las Cuatro Estaciones" de Vivaldi con escolares puede ser una experiencia enriquecedora y muy divertida, especialmente si se aprovecha el componente programático de la obra (la capacidad de la música para contar una historia o evocar imágenes).

 

1. Exploración a través de la escucha activa

Escuchar y observar:

Comienza por ponerles la música, pero pídeles que no solo escuchen, sino que también cierren los ojos y traten de visualizar lo que podrían estar viendo.

 Puedes hacer que imaginen qué cosas se podrían estar representando (por ejemplo, en el primer movimiento de "Otoño", ¿qué sonidos o imágenes le llegan a la mente?).

 

Describir lo que sienten:

Después de escuchar una parte de la obra, pídeles que expresen lo que imaginan, sienten o visualizan.

 Por ejemplo, ¿qué sensaciones o imágenes evoca la parte alegre del primer movimiento? ¿Y la parte tranquila del segundo movimiento?

 

2. Conexión con la naturaleza

 

El ciclo de las estaciones:

 Antes de escuchar la obra, repasa con los estudiantes las características de las estaciones del año, especialmente el otoño.

Puedes hablar de cómo cambian el clima, las hojas de los árboles, y las actividades de las personas en esa época. Esto prepara a los niños para identificar las representaciones musicales de esas imágenes en la obra.

 

Imitar sonidos naturales:

Los niños pueden intentar crear sonidos que representan el otoño utilizando instrumentos simples o incluso sonidos corporales (por ejemplo, palmas que imiten el viento o pasos rápidos que representen el trote de un cazador).

Esto puede ayudarles a asociar la música con lo que han aprendido sobre la estación.

 

3. Relación con otras disciplinas

Arte y pintura: Después de escuchar un fragmento de la obra, puedes hacer que los estudiantes dibujen lo que les sugiere la música.

Esto puede incluir la representación de la naturaleza (como hojas cayendo, animales en el bosque, etc.), personas celebrando una cosecha, o cualquier otra imagen que venga a su mente.

 Esto ayuda a reforzar la idea de que la música puede contar una historia visual.

Poesía o narración:

Proponer que escriban pequeñas historias o poesías inspiradas en la música. Por ejemplo, después de escuchar el segundo movimiento (el Adagio), podrían escribir sobre un paseo tranquilo por un bosque en otoño. Esta actividad integra la creatividad literaria con la musical.

 

4. Actividades rítmicas y de movimiento

 

Danza o movimiento:

 Anima a los estudiantes a moverse de acuerdo con la música. Para el primer movimiento, podrían hacer una danza o una caminata que imite la acción de la cosecha o una celebración festiva.

Para el tercer movimiento, podrían hacer movimientos más rápidos o simular una persecución (como la de los cazadores), usando movimientos rápidos y dinámicos.

Crear una coreografía sencilla:

De forma colaborativa, los niños pueden crear una pequeña coreografía para representar una escena del otoño, ya sea la caída de las hojas, una caza, o una fiesta en el campo.

 

5. Educación sobre la vida de Vivaldi

 

Contexto histórico:

Hablar sobre Antonio Vivaldi y el Barroco. Puedes explicar quién fue Vivaldi, qué estilo musical seguía y cómo su vida y época influenciaron sus obras. Hacerlo en formato de juego o trivia puede resultar más atractivo para los estudiantes.

 

Vivaldi y el violín:

Presentar el violín, el instrumento principal de la obra, y explicar su importancia en la obra. Si tienes acceso a instrumentos, un músico invitado o una grabación de un violín tocado en vivo, sería excelente para mostrar cómo el violín transmite las emociones y las imágenes de la música.

 

6. Integrar la tecnología

 

Aplicaciones musicales interactivas:

Usar aplicaciones que permitan a los niños interactuar con la música.

Hay muchas apps que permiten crear ritmos, sonidos y melodías de manera simple, lo que puede ser útil para que los niños experimenten creando sus propias versiones o interpretaciones de "Otoño".

 

Videos o animaciones:

Existen varios videos de "Las Cuatro Estaciones" que combinan música con imágenes visuales de la naturaleza y las estaciones.

Esto puede ayudar a los estudiantes a asociar directamente las imágenes y los sonidos.

7. Proyectos colaborativos

 

Un concierto en clase:

 Los niños pueden participar en un mini "concierto" en clase, donde cada grupo represente uno de los movimientos de "Otoño" utilizando instrumentos simples, sonidos corporales o incluso su propia voz. Esto les permitirá vivir la obra desde el interior y entender cómo se puede expresar música de manera colectiva.

 

Creación de una estación personalizada:

 Los estudiantes pueden crear sus propias composiciones de "Otoño" o de una estación diferente, utilizando instrumentos disponibles y elementos naturales como hojas secas o piedras para hacer sonidos. Al final, pueden presentar sus obras a la clase, comparando las diferencias y similitudes con la música de Vivaldi.

 

8. Reflexión final

 

Discusión y debate:

Después de realizar las actividades, organiza una pequeña charla sobre qué aprendieron de la música y cómo la interpretaron. Puedes preguntarles qué parte de la obra les pareció más emocionante, triste o divertida, y por qué.

Esto fomenta el pensamiento crítico y la apreciación de la música.

Al enfocar la enseñanza de "Otoño" de Vivaldi desde una perspectiva multidisciplinaria (musical, artística, literaria, histórica y natural), los estudiantes no solo disfrutarán de la música, sino que también podrán conectar con la obra de una manera profunda y personal.

 

 

 


viernes, 14 de marzo de 2025

EL 14 DE MARZO DE 1804 NACÍA JOHANN BAPTIST STRAUSS

EL MAESTRO DEL VALS



Johann Baptist Strauss I nació en Viena, el 14 de marzo de 1804.
Fue un compositor austriaco conocido particularmente por sus valses y por popularizarlos junto con Josef Lanner. Fue el fundador de una dinastía musical con sus hijos Johann Strauss (hijo), Josef Strauss y Eduard Strauss.
Su obra más famosa es probablemente la Marcha Radetzky (llamada así por Joseph Radetzky von Radetz), mientras que quizás su vals más famoso sea Lorelei Rhein Klänge op. 154.

Sus padres eran de origen  muy humildes, de ascendencia judía . Su padre se llamaba  Franz Borgias Strauss.
Ya de niño conoció la música popular de su época en la taberna de su padre, escuchando a los músicos sentado debajo  de las mesas.
Su madre murió cuando Johann tenía 7 años.
Su padre formó otra pareja y su madrastra lo colocó de aprendiz de encuadernador con Johann Lichtscheidl, pero tomó lecciones de violín y viola, además de cumplir con su aprendizaje.

En el año 1816, cuando cumplió 12 años, su padre se ahogó en el río Danubio.

Se inicia tocando en pequeñas orquestas a los quince años.
En 1823 comenzó como miembro del trío de violinistas de Josef Lanner (miembro destacado de una familia de compositores de valses), tocando valses en las tabernas de los suburbios de Viena.

El verano de 1825 se casó con Maria Anna Streim. El joven matrimonio vivió primero en la calle Lerchenfelder Strasse de Viena, donde nació Johann Strauss hijo. Más tarde la familia se afincó en el barrio Leopoldstadt. Johann Strauss padre y su mujer Anna tuvieron seis hijos. 

A pesar de que el padre cada vez se preocupase menos de sus hijos y finalmente se separase de la familia, sin embargo, tomaría las decisiones referentes a la enseñanza de los varones que en ningún caso, deberían hacerse musicos profesionales, solamente tocar para "las necesidades domésticas".
Más tarde, dejo este trío y fundó su propio conjunto musical que tocó por primera vez en 1827 en la taberna "Zu den zwei Tauben" (las dos palomas) en Landstrasser Glacis. Sus piezas tuvieron tal éxito que Adam Dömling, dueño de la taberna "Zur Kettenbrücke", le encomendó la composición de las producciones musicales para los carnavales de 1828 y 1829.

Strauss y Lanner, con sus respectivos conjuntos tardaron poco tiempo en establecerse y conquistar su público.
En 1828 el auditorio ya se encontraba dividido entre los seguidores de Strauss (Straussistas) y de Lanner (Lanneristas).
En el año siguiente Strauss triunfaría sobre su rival Lanner con la firma de un contrato de seis años con Johann Georg Scherzer, el dueño de "Sperl", uno de los establecimientos más elegantes de la ciudad.

En 1831 Strauss y Lanner asumieron juntos la dirección de la música de baile en la corte del emperador.

A partir de 1833 se desplazaba casi todos los años al extranjero para realizar giras de conciertos fuera de austria, incluyendo Inglaterra.

En 1834 fue nombrado director de música del primer regimiento de los ciudadanos de Viena.

Su "Marcha de Radetzky", 1849, una composición en honor al anciano mariscal fue un "hit" absoluto.

En 1834, convirtió a Emilie Trampusch en su amante, con la que tuvo seis hijos.

En el año 1846 se creó, especialmente para él, el título de director musical de baile de la corte austro-húngara



Johann Strauss padre fue fundador sin quererlo de una dinastía musical que dio músicos como Johann Strauss (hijo), Josef Strauss y Eduard Strauss.
Autor de 152 valses y numerosas polcas, galopas, cuadrillas y marchas. Uno de sus más populares valses es "Lorelei-Voces del Rin". Admirado por Berlioz y Paganini, pasó a la historia como el padre del vals, del que fue un gran maestro.

Murió en Viena, el 25 de septiembre de 1849.

 Las lápidas de Johann Strauss padre y Joseph Lanner como monumentos en el Parque Strauss-Lanner en Viena

OBRAS

 Valses

Täuberln-Walzer op. 1 Vals Palomitas
Wiener Karneval op. 3 Carnaval Vienés
Kettenbrücke-Walzer op. 4 Vals Puente Colgante
Tivoli-Rutsch Walzer op. 39 Vals Tobogán Tivoli
Das Leben ein Tanz oder Der Tanz ein Leben! Walzer op. 49 ¡La vida es baile!
Elisabethen-Walzer op. 71
Philomelen-Walzer op. 82
Paris-Walzer op. 101
Huldigung der Königin Victoria von Grossbritannien op. 103 Homenaje a la Reina Victoria de Gran Bretaña
Wiener Gemüths-Walzer op. 116 Sentimientos Vieneses
Lorelei Rhein Klänge op. 154 Sonidos del Rhin y del Lorelei

Polcas

Seufzer-Galopp op. 9 Galope Suspiro
Chineser-Galopp op. 20 Galope de los Chinos
Einzugs-galopp op. 35 Galope Entrada
Sperl-Galopp op. 42 Galope Sperl
Fortuna-Galopp op. 69 Galope Fortuna
Jugendfeuer-Galopp op. 90 Galope Espíritu Joven
Cachucha-Galopp op. 97 Galope Cachucha
Indianer-Galopp op. 111 Galope Indio
Sperl-Polka op. 133 Polca Sperl
Beliebte Annen-Polka op. 137 Polca Querida Ana
Piefke und Pufke Polka op. 235 Polca Piefke y Pufke


HOMENAJES

Monumento a los dos compositores del vals vienés, Johann Strauss padre y Joseph Lanner. Parque del Ayuntamiento de Viena (Rathaus) verano 2010

LEGADO


Johann Baptist Strauss I (1804-1849) fue un compositor austríaco que sentó las bases para la dinastía musical de los Strauss. Aunque su legado es menos conocido que el de su hijo Johann Strauss II, su contribución a la música es significativa y perdura hasta hoy en día.

Johann Strauss I dejó un legado duradero al fundar una dinastía musical, crear piezas icónicas como la Marcha Radetzky, y contribuir significativamente al desarrollo de la música de baile en Viena. Su influencia perdura en la música clásica ligera y en la cultura musical europea.

 

1. Fundador de una Dinastía Musical

Strauss I fue el pionero de una familia que dominaría la escena musical vienesa durante décadas.

Sus hijos, Johann Strauss II, Josef Strauss y Eduard Strauss, continuaron su legado y se convirtieron en figuras prominentes en la música de baile y opereta.

 

2. Marcha Radetzky

Su obra más famosa es la Marcha Radetzky (Op. 228), dedicada al mariscal de campo Joseph Radetzky von Radetz.

Esta marcha sigue siendo una de las piezas más reconocidas y ejecutadas en conciertos y eventos militares.

 

3. Valses y Polcas

Compuso numerosos valses y polcas que rivalizaron en popularidad con los de Josef Lanner en su época. Algunos de sus valses más destacados incluyen Loreley-Rhein-Klänge (Op. 154) y Wiener Gemüths-Walzer (Op. 116).

 

4. Influencia en la Música de Baile

Su música de baile fue fundamental para establecer Viena como un centro de música ligera y de entretenimiento.

Aunque su hijo Johann Strauss II es más conocido por popularizar el vals, Johann Strauss I sentó las bases para este género.

 

5. Legado Cultural

Su música sigue siendo parte del patrimonio cultural austríaco y europeo. Las marchas y valses de Strauss I siguen siendo interpretados en conciertos y eventos culturales, manteniendo viva su memoria y contribución a la música clásica ligera.


FUENTES

martes, 4 de marzo de 2025

EL 4 DE MARZO DE 1678 NACÍA ANTONIO VIVALDI

 

Un legado musical que trasciende el tiempo


A 347 años de su nacimiento


Antonio Vivaldi nació en Venecia, el 4 de marzo de 1678.

Fue un compositor, violinista, empresario, profesor y sacerdote católico veneciano del Barroco. Era apodado Il prete rosso («El cura rojo») por ser sacerdote y pelirrojo. Se le considera uno de los más grandes compositores barrocos, su influencia durante su vida se extendió por toda Europa y fue fundamental en el desarrollo de la música instrumental de Johann Sebastian Bach.

Su maestría se refleja en haber cimentado el género del concierto, el más importante de su época. Compuso unas setecientas setenta obras, entre las cuales se cuentan más de cuatrocientos conciertos, para flauta, violín, y una variedad de otros instrumentos musicales, y cerca de cuarenta y seis óperas. Es especialmente popular como autor de la serie de conciertos para violín y orquesta Las cuatro estaciones.

Su abuelo, Agostino, era un panadero de Brescia, casado con Margherita, con quien tuvo varios hijos.​

Uno de ellos fue Giovanni Battista, familiarmente llamado Gianbattista, que nació en 1656 y fue el padre del compositor. Margherita, tras morir su esposo, fue a Venecia con sus hijos.

Gianbattista fue peluquero antes de empezar a destacar como violinista y dedicarse a ello profesionalmente.

En junio de 1676, a los veinte años de edad, contrajo matrimonio con Camilla Calicchio.

El músico Gianbattista Vivaldi, apodado Rosso («Rojo») y registrado en algunos documentos como Giovanni Battista Rossi, fue miembro fundador del Sovvegno de' musicisti di Santa Cecilia, una organización profesional de músicos venecianos; asimismo fue violinista en la orquesta de la basílica de San Marcos y en la del Teatro San Giovanni Grisostomo.

 Existe una ópera titulada La Fedeltà sfortunata de 1689 compuesta por un Giovanni Battista Rossi —el nombre con el que el padre de Vivaldi se había unido a la Sovvegno di Santa Cecilia.

Gianbattista  y Camilla tuvieron a su hijo al que llamaron Antonio Lucio Vivaldi .

La comadrona lo bautizó en su domicilio inmediatamente después de su nacimiento, lo que dio lugar a la creencia de que pensaban que su vida estaba en peligro de alguna manera. Aunque no se conoce con certeza, el bautismo inmediato del niño fue probablemente debido o bien a su mal estado de salud o a un terremoto que sacudió la ciudad ese día.

Chiesa di San Giovanni in Bragora - Viena donde fue bautizado Vivaldi 


En el trauma del seísmo, la madre de Vivaldi pudo haberle destinado al sacerdocio. El bautismo oficial en la iglesia tuvo lugar dos meses después.

Antonio tuvo nueve hermanos, tres de los cuales murieron a edad temprana. Estos fueron: Gabriela Antonia (1676-1678), Margarita Gabriella (1680-1750), Cecilia Maria (1683-1767), Bonaventura Tomaso (1685-posterior a 1718), Zanetta Anna (1687-1762), Francesco Gaetano (1690-1752), Iseppo Santo (1692-1696), Gerolama Michela (1694-1696) e Iseppo Caetano (1697-posterior a 1729).

Su padre, el violinista Gianbattista Vivaldi, fue quien lo introdujo de lleno al mundo de la música.

Giovanni Battista enseñó a Antonio a tocar el violín y luego recorrió Venecia tocando dicho instrumento con su hijo. Probablemente aprendió a tocar el instrumento a una edad temprana, dado el amplio conocimiento musical que había adquirido a la edad de veinticuatro años, cuando comenzó a trabajar en el Ospedale della Pietà.

Es probable que Antonio también fuera discípulo de Giovanni Legrenzi, presidente del Sovvegno y uno de los primeros compositores del Barroco y maestro de capilla en la basílica de San Marcos.

Es posible que Legrenzi le diera al joven Antonio sus primeras lecciones de composición.

El académico Walter Kolneder aprecia la influencia del estilo de Legrenzi en una de las primeras obras litúrgicas de Vivaldi, Laetatus sum (RV Anh. 31), escrita en 1691 a la edad de trece años.

En 1693, a la edad de quince años, empezó a estudiar para ser sacerdote.

El 18 de septiembre de ese año, Antonio ingresó en un seminario y recibió sus primeras órdenes menores: ostiario el 19 de septiembre de 1693, lector el 21 de septiembre de 1694, exorcista el 25 de diciembre de 1695 y acólito el 21 de septiembre de 1696. El 4 de abril de 1699 fue ordenado subdiácono, luego diácono, el 18 de septiembre de 1700, y finalmente ungido sacerdote el 23 de marzo de 1703, a los veinticinco años. ​

En el año 1703 tras su ordenación como sacerdote, le apodaron Il Prete Rosso («El cura rojo»).

Vivaldi celebró misa como sacerdote sólo unas pocas veces y parecía que se había retirado de las obligaciones sacerdotales, aunque él seguía siendo miembro del sacerdocio. Se cree que esto también se debe a su hábito de componer mientras daba misa. Parece que permaneció comprometido con el Catolicismo, ya que la entrada en los registros de defunción de Viena dice: «Antonio Vivaldi, sacerdote secular».

En septiembre de 1703 Vivaldi se convirtió en maestro di violino (maestro de violín) en un orfanato llamado el Ospedale della Pietà en Venecia.

Aunque es más famoso como compositor, también fue considerado como un violinista con una excepcional técnica.

Vivaldi tenía sólo veinticinco años cuando comenzó a trabajar en el Ospedale della Pietà.

Durante los siguientes treinta años compuso la mayor parte de sus obras más importantes mientras trabajaba allí.

Había cuatro instituciones similares en Venecia, cuyo propósito era dar refugio y educación a niños abandonados o huérfanos, o cuyas familias no podían sustentarlos.

Estaban financiadas con fondos proporcionados por la República.​ Los niños aprendían un oficio y tenían que abandonar la institución cuando llegaban a los quince años.

Las niñas recibían una educación musical y las de más talento se quedaban y se convertían en miembros de la reconocida orquesta y coro del Ospedale.

Poco después del nombramiento de Vivaldi, los huérfanos comenzaron a ganar reconocimiento y consideración en el extranjero también.

Escribió conciertos, cantatas y música sacra vocal para ellos. ​ Estas obras sacras, que suman más de sesenta, son variadas, ya que incluyen motetes solistas y obras corales a gran escala para solistas, coro doble y orquesta.

Más inclinado hacia la música que a las obligaciones religiosas, Vivaldi logró que lo dispensaran de decir misa por razones de salud en 1704.

Vivaldi manifestó síntomas, strettezza di petto («opresión en el pecho»), se han interpretado como una forma de asma y según investigaciones médicas del francés Roger-Claude Travers, parecen haberse tratado de angor pectoris (angina de pecho). Esto no le impidió componer o participar en actividades musicales, a pesar de que hizo que dejara de tocar instrumentos de viento

En 1704 se añadió el cargo de maestro de viola all'inglese a sus funciones como profesor de violín. ​ La posición de maestro di coro, que ostentó durante un tiempo, requería mucho tiempo y trabajo. Tenía que componer un oratorio o concierto en cada fiesta y enseñar a los huérfanos tanto teoría de la música como a tocar ciertos instrumentos

En 1705 Giuseppe Sala publicó la primera colección (Connor Cassara) de sus obras: ​ su Op. 1 es una colección de doce sonatas para dos violines y bajo continuo, en un estilo convencional

 En 1709 apareció su op. 2, una segunda colección de doce sonatas para violín y bajo continuo.

Su relación con el consejo de administración del Ospedale a menudo era tensa. La junta tenía que votar todos los años sobre la conveniencia de mantener a los maestros. La votación sobre Vivaldi era rara vez unánime y en 1709 resultó siete a seis en su contra.

El verdadero avance como compositor llegó con su primera colección de doce conciertos para uno, dos y cuatro violines con instrumentos de cuerda, L'estro armonico op. 3, que Estienne Roger publicó en Ámsterdam en 1711, ​ dedicada a Fernando de Médici. El príncipe patrocinaba a muchos músicos como Alessandro Scarlatti y Georg Friedrich Händel.

A su vez era músico y Vivaldi, probablemente, lo conoció en Venecia. ​ L'estro armonico fue un éxito rotundo en toda Europa.

En febrero de ese año, Vivaldi y su padre viajaron a Brescia, donde se interpretó su Stabat Mater (RV 621) como parte de un festival religioso. La obra parece haber sido escrita apresuradamente: las partes de cuerda son simples, la música de los tres primeros movimientos se repite en los tres siguientes, y no todo el texto está listo. ​ Sin embargo, quizás en parte debido a la esencialidad forzada de la música, la obra se considera una de sus primeras obras maestras.

Después de ejercer un año como músico independiente, en 1711, lo llamaron de nuevo desde el Ospedale, con un voto unánime; claramente durante su ausencia de un año la junta se dio cuenta de la importancia de su papel.

A comienzos del siglo XVIII, la ópera era el entretenimiento musical más popular en Venecia y demostró ser el más rentable para Vivaldi. Hubo varios teatros que competían por la atención del público. Comenzó su carrera como compositor de ópera como una actividad secundaria: su primera ópera, Ottone in villa no se representó en Venecia, sino que lo hizo en el Teatro Garzerie en Vicenza en 1713.

Al año siguiente 1714, se convirtió en impresario del Teatro San Angelo en Venecia, donde se realizó su ópera Orlando finto pazzo. La obra no fue del gusto del público, por lo que se clausuró después de un par de semanas y se reemplazó con una repetición de una obra diferente ya representada el año anterior.

En 1714 publicó La stravaganza op. 4, una colección de conciertos para violín y cuerdas,​ dedicado a su antiguo estudiante de violín, el noble veneciano Vettor Delfin.

En 1715 presentó Nerone fatto Cesare (RV 724, ahora perdida), con música de diferentes compositores dirigidos por él. La ópera contenía once arias y fue un éxito.

En la última temporada, planeó representar Arsilda, regina di Ponto (RV 700), una ópera compuesta completamente por él, pero el censor de la ciudad bloqueó la representación. El personaje principal, Arsilda, se enamoraba de otra mujer, Lisea, que se hace pasar por un hombre.

En el año 1716, Vivaldi consiguió que el censor aceptara la representación de la ópera y fue un rotundo éxito.

También en  1716 lo ascendieron a maestro di concerti (director musical), ​ lo que le convirtió en responsable de toda la actividad musical de la institución.

En este periodo, el Ospedalle le encargó varias obras litúrgicas. Las más importantes fueron dos oratorios. Moyses Deus Pharaonis, (RV 643) se perdió.

El segundo, Juditha Triumphans (RV 644), celebraba la victoria de la República de Venecia contra el Imperio otomano y la captura de la isla de Corfú. Compuesta en 1716, es una de sus obras sacras más destacadas. Las once partes cantadas fueron interpretadas por chicas del Ospedalle, tanto los papeles masculinos como los femeninos. Muchas de las arias incluyen partes de instrumentos solistas —flautas dulces, oboes, violas de amor y mandolinas— que muestran el talento que tenían las chicas.

También en 1716, Vivaldi escribió y produjo dos óperas más, L'incoronazione di Dario (RV 719) y La costanza trionfante degl'amori e degl'odii (RV 706).

En 1717 y 1718 le ofrecieron un nuevo prestigioso puesto como maestro de capilla en la corte de Felipe de Hesse-Darmstadt, gobernador de Mantua. ​

Se trasladó allí durante tres años y produjo varias óperas, entre ellas Tito Manlio (RV 738).

Durante su estancia en la ciudad, Vivaldi conoció a una joven aspirante a cantante, Anna Tessieri Girò, que se convirtió en su discípula y prima donna favorita. Anna, junto con su hermanastra mayor Paolina, pasaron a formar parte de la comitiva de Vivaldi y lo acompañaron regularmente en sus muchos viajes.

Hubo especulaciones sobre la naturaleza de la relación entre Vivaldi y Girò, pero no hay ninguna evidencia que indique que hubiera algo más allá de la amistad y la colaboración profesional. Aunque Vivaldi fue cuestionado por su relación con Anna Girò, negó rotundamente cualquier relaciónromántica.

En el año 1718 La costanza trionfante degl'amori e degl'odii fue tan popular que se representó dos años después, reeditada y con nuevo título, Artabano re dei Parti (RV 701, ahora perdida).

 A pesar de sus frecuentes viajes a partir de 1718, el Ospedalle le pagó 2 cequíes por escribir dos conciertos al mes para la orquesta y por ensayar con ellos por lo menos cinco veces cuando estaba en Venecia.

En el año 1721 escribió Las cuatro estaciones, cuatro conciertos para violín que representan escenas apropiadas para cada estación del año.

Tres de los conciertos fueron originales en su concepción, mientras que el primero, «Primavera», tomó prestados motivos de una sinfonía del primer acto de su ópera contemporánea Il Giustino. La inspiración para los conciertos probablemente le vino de los campos de Mantua. La obra fue una revolución musical en su concepción: en estos conciertos representó arroyos fluyendo, pájaros cantando (de diferentes especies, cada uno caracterizado específicamente), perros ladrando, mosquitos zumbando, pastores llorando, tormentas, bailarines borrachos, noches silenciosas, partidas de caza tanto desde el punto de vista de los cazadores como de las presas, paisajes helados, niños patinando sobre hielo y cálidos hogueras inviernales.

Cada concierto está asociado a un soneto, posiblemente del propio compositor, que describe las escenas representadas en la música. Fueron publicados como los primeros cuatro conciertos en una colección de doce, Il cimento dell'armonia e dell'inventione, op. 8, publicada en Ámsterdam por Michel-Charles Le Cène en 1725

En el año 1721 fue a Milán, donde presentó el drama pastoral La Silvia (RV 734, sobreviven nueve arias).

Visitó de nuevo la ciudad el año siguiente con el oratorio L'adorazione delli tre re magi al bambino Gesù (RV 645, ahora perdido).

En 1722 se mudó a Roma, donde le dio un nuevo estilo a sus óperas. El nuevo papa Benedicto XIII lo invitó a que tocara para él.

Los registros del Ospedalle muestran que le pagaron ciento cuarenta conciertos entre 1723 y 1733.

En 1725 volvió a Venecia, donde produjo cuatro óperas en el mismo año.

En la cúspide de su carrera recibió encargos de la nobleza y realeza europea.

La serenata (cantata) Gloria e Imeneo (RV 687), de 1725, fue un encargo del embajador francés en Venecia para la celebración del matrimonio de Luis XV.

En el año 1726 escribió otra serenata, La Sena festeggiante (RV 694), que fue estrenada en la embajada de Francia para celebrar el nacimiento de las princesas francesas, Enriqueta y Luisa Isabel. ​ La Cetra op. 9 estaba dedicada al emperador Carlos VI.

En 1728, Vivaldi conoció al emperador mientras que este estaba de visita en Trieste para revisar la construcción de un nuevo puerto. Carlos admiraba la música del compositor tanto que dijo que había hablado más con el compositor durante su encuentro que lo que había hablado con su ministros en los últimos dos años.

Le otorgó el título de caballero, una medalla de oro y una invitación a Viena. El compositor le correspondió con un manuscrito de La Cetra, un conjunto de conciertos casi por completo diferentes del conjunto con el mismo título y publicados como op. 9. La impresión probablemente se retrasó, lo que obligó a Vivaldi a preparar una improvisada versión para el emperador

Vivaldi viajó a Viena y Praga en 1730 acompañado por su padre, donde presentó su ópera Farnace (RV 711),b​ que tuvo seis reposiciones.49​ Algunas de sus óperas posteriores las creó en colaboración con dos de los principales escritores italianos de la época. L'olimpiade y Catón en Útica las escribió Pietro Metastasio, el principal representante del movimiento arcadiano y poeta de la corte en Viena. Un joven Carlo Goldoni reescribió Griselda a partir de un libreto previo de Apostolo Zeno

También se escenificó en el Teatro San Angelo en 1731.

En 1732 se representó en Praga, con el nombre de Doriclea (RV 708). ​ En los años siguientes, escribió varias óperas que fueron representadas por toda Italia

Como muchos compositores contemporáneos, en los últimos años de su vida pasó dificultades económicas. Sus composiciones ya no tenían tanta estima como antes en Venecia, ya que habían cambiado rápidamente los gustos musicales y eran consideradas pasadas de moda. En respuesta, este optó por vender un número considerable de sus manuscritos a precios ínfimos para financiar su traslado a Viena.

​ La razón de su marcha de la ciudad no está clara, pero parece probable que, después del éxito de su encuentro con el emperador Carlos VI, deseara conseguir el puesto como compositor en la corte imperial. En su viaje a Viena, pudo haberse detenido en Graz para visitar a Anna Girò.

También es probable que Vivaldi fuera a Viena para presentar óperas, especialmente porque residió cerca del Kärntnertortheater.

Poco después de su llegada a la ciudad, Carlos VI falleció, lo que le hizo perder cualquier protección imperial o una fuente estable de ingresos.

Al poco tiempo, empobreció y murió de una «infección interna» durante la noche del 27 al 28 de julio de 1741, a la edad de 63 años, ​ en una casa propiedad de una viuda de un fabricante de sillas de montar vienés.



 El 28 de julio fue enterrado en una tumba sencilla del cementerio que era propiedad de un hospital público, cerca de la iglesia de San Carlos Borromeo.

Su funeral tuvo lugar en la catedral de San Esteban.d​ El coste del funeral con un «Kleingeläut»e​ fue de 19 Gulden 45 Kreuzer, que era bastante caro para el más bajo tipo de repique de campanas.

 Conoció el talento, el éxito y la pobreza. Con su muerte, cayó en el olvido y no fue hasta el siglo XX, con las investigaciones del italiano Alberto Gentili, que el músico veneciano logró convertirse en una de las figuras máximas de la música barroca.

Con su muerte, su música también había desaparecido: no había copias de sus composiciones, ni discípulos ni, por supuesto, grabaciones. El nombre de Antonio Vivaldi estaba olvidado. Lo poco que se sabía de él era por su gran contemporáneo, Johann Sebastian Bach, quien había incorporado algunos elementos de la música de Vivaldi.

Fue recién durante el siglo XX, gracias al trabajo de investigadores académicos -como el italiano Alberto Gentili, profesor de Historia Musical en la Universidad de Turín- que se produjo uno de los descubrimientos más importante de la historia de las artes musicales. En este caso, este hallazgo logró el renacimiento de la obra de Vivaldi.

En una de aquellas investigaciones en la ciudad de San Marino, cerca de Turín, Gentili tuvo la tarea de revisar en 1926 casi 100 volúmenes de música. Entre ellos, había 14 de Vivaldi con 149 piezas instrumentales, 29 cantatas, 12 óperas y 1 oratorio. Gentili, por cómo estaban enumeradas las obras, se dio cuenta de que aquello era solo la mitad y fue en busca del resto. Encontró la parte faltante y, con ellos, sumaron en total 27 volúmenes. El investigador reconoció que, en todas estas obras armoniosamente complejas, estaba no solo la producción de un músico enorme, sino también gran parte del espíritu cultural de ese momento. Con los sucesivos estudios, Antonio Vivaldi, quien en vida había sido una figura con relativa importancia, se convirtió en uno de los compositores más emblemáticos del Barroco italiano.

HOMENAJES

Estatuas del Monumento Antonio Vivaldi en el Parque Votivpark Viena - Austria


“La escultura de Antonio Vivaldi” de Gianni Aricò, 2006

(Copia en bronce del monumento en Rooseveltplatz, Viena)

Fuera de la terminal de cruceros de San Basilio

Antonio Vivaldi es uno de los compositores más conocidos de la música barroca. Su vida se ha llevado al cine en varias ocasiones.



En el 1989 se estrenó Rosso veneziano, un thriller que trata sobre una serie de crímenes ocurridos en la Venecia del siglo xviii que Vivaldi, junto a sus amigos Carlo Goldoni y Giovanni Battista Tiepolo, intenta resolver.

 


En el 2006 se estrenó la película biográfica franco-italiana Antonio Vivaldi, un prince à Venise, dirigida por Jean-Louis Guillermou y protagonizada por Stefano Dionisi.

 


En el 2009 se estrenó la película biográfica anglo-italiana Vivaldi, the Red Priest, dirigida por Liana Marabini y protagonizada por Steven Cree.

 


Existen otros proyectos, como Vivaldi de Boris Damast y protagonizado por Joseph Fiennes o la película homónima de Patricia Riggen, protagonizada por Ben Kingsley, Jessica Biel y Luke Evans.

 

Además, se ha utilizado su música en más de trescientas sesenta películas y programas de televisión.

 


En 2005 la cadena australiana ABC Radio National encargó un radioteatro sobre la vida del compositor, escrito por Sean Riley y titulado The Angel and the Red Priest. La obra fue posteriormente adaptada para el teatro e interpretada en el Adelaide Festival of the Arts. Janice Jordan Shefelman escribió un libro para niños detallando la vida del compositor que se titula Vivaldi.

 


El asteroide (4330) Vivaldi, descubierto por Freimut Börngen el 19 de octubre de 1982.

 


Nominan en su honor, como glaciar Vivaldi, al norte de la isla Alejandro I en la Antártida. ​

 LEGADO

Antonio Vivaldi dejó un legado musical profundo y duro que sigue siguiendo relevante en la actualidad.

Vivaldi se caracterizó por su innovación en la música instrumental, su influencia en la música clásica y su capacidad para evocar emociones a través de su música, lo que lo convierte en uno de los compositores más importantes de la historia.

 

Legado Musical

Conciertos Instrumentales:

Vivaldi es conocido por haber cimentado el género del concierto, especialmente con sus conciertos para violín. Compuso más de 400 conciertos, muchos de los cuales son considerados obras maestras del Barroco.

Uso de Instrumentos Solistas:

Sus conciertos destacan el papel del solista, como el violín, frente a la orquesta, creando un diálogo musical entre el solista y la orquesta.

 

Innovación en la Música Programática:

Su obra más famosa "Las Cuatro Estaciones"es un ejemplo destacado de música programática.

Cada concierto está acompañado de un soneto que describe lo que la música representa, fusionando la poesía con la música de una manera innovadora para su época.

Esta serie de conciertos evoca imágenes vívidas de la naturaleza, lo que fue innovador en su época.

 

Influencia en la Música Clásica:

Su estilo influyente en compositores posteriores, como Johann Sebastian Bach, y su música sigue siendo ampliamente interpretada y estudiada en todo el mundo.

Johann Sebastian Bach, transcribe varios de sus conciertos para otros instrumentos.

Estructura Formal y Rítmica:

Vivaldi popularizó la estructura de concierto en tres movimientos: rápido-lento-rápido.

Esta forma, conocida como "formato vivaldiano", se convirtió en un estándar para muchos compositores posteriores.

 

Contrastes Armónicos y Melodías Innovadoras:

Vivaldi buscaba contrastes armónicos y melodías innovadoras en sus composiciones, lo que les daba un carácter llamado y lleno de vitalidad.

 

Rapidez Compositiva:

Vivaldi era conocido por su capacidad para componer rápidamente, lo que a veces iba en detrimento de la calidad, pero también reflejaba su energía creativa.

 

Redescubrimiento y Popularidad:

Aunque su música cayó en el olvido después de su muerte, experimento un resurgimiento en el siglo XX, y hoy en día es una de las más populares y grabadas de la música clásica.

 

Composiciones para el Ospedale della Pieta:

Vivaldi compuso muchas obras para el conjunto musical femenino del Ospedale della Pietà, un orfanato y conservatorio musical en Venecia, donde enseñó y trabajó duro varios períodos.

 

Impacto Cultural

Influencia en Otros Géneros Musicales:

Su música ha influido no solo en la música clásica, sino también en otros géneros musicales y en la cultura popular.

 

Legado Perdurable:

Su legado es comparable al de otros grandes compositores del Barroco, como Bach y Händel, y su música sigue manteniendo un puente entre el pasado y el presente.

FUENTES

https://datos.bne.es/

https://www.cultura.gob.ar/

https://es.wikipedia.org/

https://www.biografiasyvidas.com/

https://www.worldhistory.org/

https://www.buscabiografias.com/

https://musicaantigua.com/