La apreciación es el eje que se relaciona con el desarrollo de una mirada y una escucha curiosa y atenta, integrando capacidades perceptuales y reflexivas con la sensibilidad y emotividad.
Se enseñará a mirar y reflexionar para poder interpretar diferentes tipos de obras, significándolas y valorándolas desde criterios personales.
La apreciación requiere del conocimiento de los elementos y técnicas que integran las diferentes composiciones estéticas (musicales, visuales, escénicas, literarias) y de la contextualización de las mismas.
Incorporar conocimientos de la Historia del Arte en la escuela posibilita que el alumno conozca el patrimonio nacional y mundial, comprendiendo el papel esencial de las artes a lo largo de la historia de la humanidad y de su papel en la comprensión de las diversidades culturales.
La producción artística en la escuela refiere al hacer propiamente dicho. Producir significa desarrollar el quehacer plástico, teatral, musical y literario mediante realizaciones concretas en cada uno de los lenguajes artísticos. Cantar una canción, improvisar una escena teatral, inventar una coreografía corporal, realizar una escultura, pintar un cuadro o escribir un poema constituyen actividades estéticas de los niños en la escuela donde lo esencial estará en el proceso de desarrollo creativo y no en el producto final.
pág 77 - Programa de Educación Inicial y Primaria - 2008
Forjando Sueños en
Piedra
Gian Lorenzo Bernini nació el 7 de diciembre de 1598 en Nápoles.
Gian fue escultor, arquitecto y pintor italiano, considerado uno de los artistas más destacados del Barroco.
Su padre fue el escultor Pietro Bernini.
Al poco tiempo Pietro se trasladó a Calabria junto con su mujer, la napolitana Angélica Galante, y su hijo.
En 1605 se instalan en Roma y Pietro obtiene la protección del cardenal Scipione Caffarelli-Borghese y la ocasión de mostrar el precoz talento de Gian Lorenzo.
Pietro Bernini, se instaló en Roma el año 1605 para trabajar en las obras de Pablo V. Realizó, entre otras, el relieve de La Asunción de la Virgen en el baptisterio de la basílica de Santa María la Mayor. También participó en la construcción de la Capilla Paulina, proyectada por Flaminio Ponzio para albergar la tumba de los papas Pablo V y Clemente VIII.
La Roma de inicios del siglo XVII era una ciudad de un fervor artístico excepcional, novedoso y revolucionario, que acogía artistas de toda Europa en una continua confrontación de ideas y experiencias artísticas. En este ambiente trabajaron maestros como Caravaggio, Annibale Carracci o Peter Paul Rubens, quienes abrieron la senda del Barroco.
Roma
Pietro, fue el primer maestro de su hijo, era un escultor manierista de cierto talento, y su influencia se notaría en las primeras obras de Gian Lorenzo. A su lado el joven Bernini aprendería la organización de un taller colectivo -en el futuro dirigirá muchos- y la fusión interna de un proyecto arquitectónico con la iconografía, la escultura y la pintura.
La cabra Amaltea amamantando a Zeus niño
Su carrera la llevó a cabo en Roma. Sus obras se basan sobre el arte heleno, como L"a cabra Amaltea amamantando a Zeus niño" y un joven sátiro. Sus grupos escultóricos de 1620, como El rapto de Proserpina (1621-1622, Galería Borghese, Roma), exponen un dramatismo inherente.
Entre 1621 y 1625 Bernini realizaría cuatro obras que lo consagrarían como un maestro de la escultura y le darían fama. Se trata de los cuatro Grupos Borghesianos, cuatro grupos escultóricos basados en temas mitológicos y bíblicos encargados por el cardenal Borghese.
Las obras en cuestión eran “Eneas”, “Anquises y Ascanio”, basado en la Eneida, el Rapto de Proserpina, el David y Apolo y Dafne. Son obras monumentales que marcarían una nueva dirección en la carrera de Bernini. Las cuatro permanecen actualmente en la Galería Borghese de Roma.
El rapto de Proserpina
Apolo y Dafne
Eneas, Anquises y Ascanio - Bernini
David
Fue por estos años cuando se inició en sus primeros proyectos arquitectónicos, como la fachada de la iglesia de Santa Bibiana de Roma (1624-1626) y la creación del magnífico baldaquino (1624-1633), dosel sobre el altar mayor de la basílica de San Pedro, que se lo encargó el papa Urbano VIII, primero de los siete pontífices para los que trabajó.
Fachada de la iglesia de Santa Bibiana de Roma
El Baldaquino de San Pedro del Vaticano
En la década del 40 también realizaría la famosa Fuente de los Cuatro Ríos, en la Plaza Navona de Roma, y la escultura La Verdad, actualmente en la Galería Borghese.
También la Fuente del Tritón y Obelisco de Minerva.
Fuente de los Cuatro Ríos 
Escultura La Verdad
Fuente del Tritón- 1642–43
Obelisco de Minerva
Más adelante realizó las tumbas de Urbano VIII (1628-1647) y Alejandro VII (1671-1678), ambas en la basílica de San Pedro. En la Cátedra de San Pedro (la silla gestatoria, 1657-1666), en el ábside de la basílica, utilizó mármol, bronce y estuco en una composición en movimiento ascendente. Fue el primero que tuvo en cuenta la luz en los grupos escultóricos según se observa en Éxtasis de Santa Teresa (1645-1652, Santa Maria della Vittoria, Roma), donde los rayos del sol, surgidos de una fuente invisible, iluminan a la santa. Los numerosos bustos que realizó expresan un sentimiento análogo de realismo dramático, como El alma condenada y El alma salvada (ambas de aproximadamente 1619, Casa de España, Roma), como los que eran retratos, por ejemplo el del Cardenal Scipione Borghese (1632, Galería Borghese) o el de Luis XIV de Francia (1665, Palacio de Versalles).
Tumba de Urbano VIII
Tumba de Alejandro VII
Éxtasis de Santa Teresa
Entre sus obras arquitectónicas no religiosas se incluyen proyectos para diversos palacios: el palacio Ludovisi (hoy palacio Montecitorio, 1650) y el palacio Chigi de Roma (1664), así como unos diseños para el Louvre, proyecto que no llegó a ejecutarse.
Palacio Ludovisi (hoy palacio Montecitorio)
Palacio Chigi de Roma
Proyectó tres iglesias: la de Castelgandolfo (1658-1661) construida sobre planta de cruz griega, y la de Ariccia (1662-1664) con planta circular. La tercera es su mayor logro dentro de la arquitectura religiosa: el templo de San Andrés del Quirinal (1658-1670) de Roma se construyó sobre planta oval con un porche ovoide que se extiende por delante de la fachada. También de la década de 1660 son la Scala Regia (Escalera real, 1663-1666), que conecta las habitaciones papales del palacio del Vaticano con la basílica de San Pedro, y la Plaza de San Pedro (diseñada en 1667), que enmarca la entrada a la basílica dentro de un espacio oval dinámico formado por dos columnatas semicirculares.
Su última obra fue El busto del Salvador (Museo Chrysler, Norfolk, Virginia).
Iglesias de Castelgandolfo
Iglesia de Ariccia
Templo de San Andrés del Quirinal
Plaza de San Pedro
El busto del Salvador
A lo largo de su vida realizó numerosos retratos de papas, reyes y nobles, que le reportaron fama y riqueza. Les solía retratar a la heroica, realzando la expresión y magnificencia. El mismo confesó inspirarse para ello en Rafael.
En estos retratos Bernini gusta de representar la moda de la época, mostrándonos las grandes pelucas utilizadas. Los abundantes pliegues dan dinamismo a la figura y generan una difuminación de carácter pictórico.Gian Lorenzo Bernini falleció el 28 de noviembre de 1680.
Autorretrato juvenil
Retrato
Dibujo -Autorretrato
Retrato de busto de Luis XIV
Retrato de busto de Constanza Buanorelli
Retrato del Cardenal Scipione Borghese
Retrato de busto de Francesco Barberini
Busto de Medusa
HOMENAJES
Gian Lorenzo Bernini ha
recibido hogares póstumos modestos pero significativos, principalmente placas
conmemorativas en Roma que marcan su vida y obra, preservando su legado barroco
en escultura y arquitectura.
En 1898, en el aniversario de
su nacimiento, se instaló una placa y un pequeño busto en su casa de la Via
della Mercede 12 en Roma, con la inscripción "Aquí vivió y murió
Gianlorenzo Bernini, sobrio del arte, ante quien se inclinaron reverentemente
papas, príncipes y pueblos"
Otra placa más ornamentada adorna el edificio
donde residió desde 1642 hasta su muerte en 1680, une está fijado al número
incorrecto (12 en lugar de 11).
Una tercera plaza conmemora su
nacimiento en Nápoles el 7 de diciembre de 1598 y sus primeras obras maestras
como David y Apolo y Dafne.
En los Musei Capitolini de
Roma existe una placa de 1926 que celebra su nombre como cavaliere o figura
destacada.
No se registran estatuas,
plazas, calles o museos dedicados exclusivamente a Bernini, pero su memoria
perdura en exposiciones, guías turísticas y el mantenimiento de sus obras en
sitios como la Basílica de San Pedro.
Su influencia en monumentos
funerarios, como los de los papas Urbano VIII y Alejandro VII, siga siendo
estudiada y admirada.
LEGADO
El legado estilístico de Gian
Lorenzo Bernini en el arte perdura por su transformación del barroco en un
estilo dinámico, emocional y multisensorial, juego con la rigidez renacentista
para priorizar el movimiento, la luz dramática y la integración de escultura,
arquitectura y pintura.
Innovaciones en Escultura
Bernini revolucionó la cultura
al capturar el instante de acción y emoción intensa, como en su David (1624),
donde el cuerpo se devuelve con realismo visceral y texturas lifelike en
mármol, influenciando en movimientos posteriores como el futurismo y el
expresionismo alemán.
Las texturas realistas en
mármol se refieren a la capacidad de los escultores para tallar y pulir el
mármol de modo que imite con hiperrealismo las texturas de la piel humana,
cabellos, draperías o tejidos, logrando un efecto visual y táctil tan visto que
parece "vivo" o natural, gracias a la finura del grano del material y
su translucidez que permite la penetración de luz similar a la carne.
Sus técnicas de drapería
fluida y expresiones faciales hiperrealistas, basadas en modelos vivos, evocan
respuestas sensoriales profundas, elevando la escultura de representación
estática a experiencia inmersiva.
Impacto en Arquitectura y Más
Allá
En arquitectura, Bernini
liberó estructuras simétricas para infundillas de drama y emoción, como en la
Plaza de San Pedro, donde la integración de formas crea espacios teatrales que
inspiran asombro religioso y persisten en diseños contemporáneas.
Su énfasis en la sensualidad
corporal y narrativa emocional pavimentó el camino para artistas modernos como
Auguste Rodin, Umberto Boccioni y Jeff Koons, y se ve en cine, teatro y
arquitectura actual por su uso de iluminación emotiva y dinamismo.
Hoy, exposiciones globales y
estudios académicos mantienen viva su influencia, definidolo como sinónimo del
barroco.
FUENTES
Buscabiogrfías
1 comentario:
Me gusta la entrada. Yo tengo una web dedicada a roma y bernini. romabernini.info
Saludos
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