EL 18 DE JULIO DEL AÑO
1842 NACÍA ELBIO FERNÁNDEZ
DEFENSOR DE LA EDUCACIÓN
POPULAR
Elbio Fernández Eulacio
Elbio Fernández Eulacio nació
en Montevideo, el 18 de julio de 1842.
Fue un abogado, periodista,
magistrado y educador uruguayo. Cofundador junto con José Pedro Varela y otros
de la Sociedad de Amigos de la Educación Popular que defendía la laicidad de la
educación.
Sus padres, Justo Fernández y
Antonia Eulacio, pertenecían a la naciente clase media montevideana, y
procuraron para su hijo la mejor educación que podía impartirse en aquellos
años.
Recibió el grado de
Bachiller en Ciencias y Letras en la Universidad de la República el 26 de
agosto de 1860 y el grado de Doctor el
1º de marzo de 1863, de manos del Rector de la Universidad Dr. Fermín Ferreira.
Este mismo día recibieron: el
doctorado Carlos Ambrosio Lerena; y título de bachilleres José María
Castellanos, Román García, Francis- co Muñoz, Eliseo F. Outes, Alfredo Vásquez Acevedo,
los que también formaron parte del grupo de 206 personalidades que firmaron el
Acta Inicial de la Sociedad de Amigos de la Educación Popular en 1868.
El Siglo fue
fundado en 1863 y contó con la primera imprenta a vapor del Uruguay.
Apenas egresado comienza
a trabajar como uno de los redactores fundadores de El Siglo, aquel diario que
Adolfo Vaillant sacó a la calle el 1º de febrero de 1863, diario cuya
circulación prohibiera el gobierno de Berro el 22 de agosto del propio año.
Vinculado al Partido Colorado,
apoyó el movimiento del general Flores, aunque no fue un portavoz acrítico de
su dictadura
Emigró cuando el general
Venancio Flores, uno de los jefes militares del Partido Colorado, al que
Fernández era adepto, trajo la revolución al país, el 19 de abril de 1863.
Triunfante el movimiento armado de Flores el 65, El Siglo reapareció en 2ª
época y el Dr. Elbio Fernández volvió a la casa como redactor en jefe.
Correligionario del general
Venancio Flores, erigido en Gobernador Provisorio, se reservó, como no podía ser
de otro modo dado su temperamento y su independencia de carácter, el derecho de
protestar contra todo acto de Flores que no estuviere encuadrado en las
estrictas reglas de ética a que ajustaba su conducta.
El tratado de la Triple
Alianza, lo indujo a formular duras protestas contra el gobierno y su política
exterior, y esa actitud trajo consigo su alejamiento de El Siglo.
Designado Defensor de Oficio
por el Tribunal de Justicia, se aplicó al cargo con verdadera devoción. Fue
proverbial su acción protagónica en un famoso litigio de tierras, antiguo y
complejo pleito reivindicatorio
Cuando el país fue llamado a
elecciones en 1867 por el gobernador Flores, a fin de restablecer la demorada
constitucionalidad de la República, Fernández resultó elegido suplente de
Diputado por Salto.
El nuevo presidente General
Lorenzo Batlle apenas en posesión de mando, el 1º de marzo de 1868, lo designó
Fiscal de Gobierno y Hacienda.
Se casó con Dolores Algorta
Villademoros.
El nuevo presidente General
Lorenzo Batlle apenas en posesión del mando, el 1º de marzo de 1868, lo designó
en el propio mes Fiscal de Gobierno y Hacienda, y supo mostrar en ese cargo de
alta responsabilidad las mismas relevantes condiciones que pusiera de
manifiesto cuando ejerciera la Defensoría de Oficio.
Espíritu emancipado al que
animó siempre un encendido afán por la divulgación de la enseñanza, fue miembro
de la Comisión del Instituto de Instrucción Pública –máxima autoridad escolar
en aquel tiempo- al que renunció por desacuerdos irreconciliables como lo demuestra su carta de renuncia.
Sr. Presidente de la Comisión
de Instrucción Pública, dependiente de la
Comisión Económica
Administrativa.
Cuando acepté el cargo de
miembro de la Comisión de Instrucción Pública, como cuando acepté el de
Miembro del Instituto, fue impulsado por una noble consideración: el deber de
servir a mi país en esa noble tarea de educar al pueblo que, en medio de la
acción vertiginosa de nuestros partidos, es tal vez la única que da
resultados positivos para el progreso moral del país, y la convicción de que en
esos puestos no me vería nunca rozado por los movimientos de la política, de la
que me había separado y en la que mi modo de pensar no me dejaba ya lugar.
Lo que ha sucedido en la
reciente elección de representantes ha venido a desengañarme. Los maestros de
las escuelas públicas han sido intimados por orden del Presidente de la
Comisión Económica Administrativa, de votar por una lista determinada, bajo
apercibimiento de destitución, es decir, se ha falseado el principio de la
soberanía popular por medio de la presión más irritante y depresiva de la
dignidad humana.
Yo no quiero la más leve
sombra de solidaridad en ese falseamiento y por lo tanto, vengo a presentar a
Vd. mi renuncia indeclinable del cargo de miembro de esa Comisión.
Dios guarde a Vd. muchos años.
Elbio Fernández.
Montevideo, diciembre 3 de 1867.
En el año 1968, en un Montevideo casi colonial, convulsionado por las guerras, epidemias, asesinatos, crisis económica, revoluciones y sublevaciones, un grupo de jóvenes funda el 18 de setiembre la Sociedad de Amigos de la Educación Popular, cuyo objeto primordial es “consagrarse a la causa de la educación popular”.
Entre los 206 jóvenes miembros se encuentran Carlos María Ramírez (20 años), Elbio Fernández (26 años) y José P. Varela (23 años), quien da el discurso inaugural. Pocos días después fue aprobado su estatuto y designada su primera Comisión Directiva, presidida por Elbio Fernández.
Entre las decisiones prioritarias de esa primera Comisión Directiva estuvo la de abrir una Escuela que fuera el campo experimental de la reforma de la educación.
El 5 de marzo de 1869 el Dr. Fernández fue convocado
como suplente por la Cámara de Representantes en momentos
en que se hallaba en cama atacado por una dolencia mortal que lo inhibía de toda
actividad por insignificante que fuese.
Sin embargo convocado por la Cámara
para resolver con su voto una situación política que se hallaba estancada hasta
ese momento, (realizó una votación para la reforma de la educación), no duda un instante y levantándose de la cama, consciente de la importancia de su voto, concurre en pleno
invierno, al recinto legislativo acompañado de su médico de cabecera que no lo
abandonó nunca para, luego de prestar su juramento de rigor, incorporarse a la
cámara y decidir con su voto el rechazo del proyecto que él entendía como
perjudicial para los intereses de la Nación.
Pocos días después moría en Montevideo el 17 de junio de 1869. y por esta
circunstancia al inaugurarse la escuela de la Institución el 29 de agosto de
1869, fue bautizada Escuela Elbio Fernández
"Murió Rígido en moral, ultra liberal en religión y en política, era una mente sólida, admirablemente bien equilibrada", dijo de él Julio Herrera y Obes cincuenta años más tarde. Como periodista –agregó- tenía un gran parecido con Florencio Varela.
FUENTES
https://es.wikipedia.org/
https://www.historiahoy.com.ar/